Toma fondo de estabilización y elimina aguinaldos; presidente ofrece crear 2 millones de empleos y dar 2.1 millones de créditos a Pymes con recursos del Gobierno; fondos vendrían de fideicomisos cerrados, austeridad y rifa de bienes decomisados; promete no subir deuda; crisis es transitoria, asegura; y advierte que, “a pesar de las adversidades, no se detendrá la transformación”; mandatarios del PAN ven decepcionante plan del Ejecutivo; CCE, incompleto; pide buen juicio en tiempos de crisis
A pesar de las adversidades, no se detiene la transformación de México, sostuvo el Presidente Andrés Manuel López Obrador durante su cuarto informe de Gobierno; el primero de 2020.
“Son más nuestras fortalezas que las debilidades y son muchos más los ciudadanos que buscan el cambio verdadero que quienes apuestan al retroceso. Esta crisis es pasajera”, aseveró en el discurso que duró 52 minutos, y reiteró que pronto regresará la normalidad y se reactivará la economía del país.
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En una ceremonia en la que estuvo completamente solo, sin invitados especiales, López Obrador anunció medidas para mantener a flote la economía, sin recurrir a deuda pública.
Vestido con traje azul marino, camisa blanca y corbata guinda, sostuvo que “la fórmula para remontar la crisis transitoria es la suma de tres elementos básicos: mayor inversión pública para el desarrollo económico y social, empleo pleno y honestidad, y austeridad republicana”.
Explicó que “sin aumentar impuestos, ni generar gasolinazos, se recurrirá a los ahorros del Fondo de Estabilización de los ingresos presupuestarios y recursos que mantenían guardados en fideicomisos”.
El jefe del Ejecutivo señaló que se aplicará mayor rigor al plan de austeridad, para lo que “se bajarán los sueldos de altos funcionarios y se eliminarán los aguinaldos, desde el cargo de subdirectores hasta el Presidente”; asimismo, se reducirá el gasto de publicidad del Gobierno, la partida de viáticos y gastos de operación para ahorrar más en compras a proveedores y en los costos de obras públicas, y no se despedirá a trabajadores del Estado; se intensificará la enajenación de bienes malhabidos para seguir con las subastas.
López Obrador adelantó que la próxima semana presentará un programa de inversión público-privada para el sector energético por 339 mil millones de pesos, y sostuvo que aumentará la inversión pública para la creación de empleos y se otorgarán créditos a pequeñas empresas familiares; y a quienes se buscan la vida día con día, “no los vamos a dejar en el desamparo”.
Además anunció que el programa Sembrando Vida, que da empleo permanente a 230 mil sembradores, “se ampliará para 200 mil campesinos (más)”.
También se invertirán 25 mil millones en viviendas de zonas marginadas y la “creación de 228 mil empleos directos”. Se otorgarán apoyos directos 190 mil pescadores, para el mantenimiento de 31 mil planteles escolares, se contratará a 45 mil médicos y enfermeras y se reclutará a 31 mil elementos para el Ejército, la Marina y la Guardia Nacional.
Otras acciones, expuso, son mantener la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, la Refinería en Paraíso, Tabasco, el Tren del Istmo, el Tren Maya, entre otros, al indicar que “vamos a crear en nueve meses, dos millones de nuevos empleos”.
Destacó la continuidad de programas sociales, como pensiones a adultos mayores, becas escolares, tandas del bienestar, apoyo a productores, entre otros.
En materia de seguridad, López Obrador indicó que, aunque poco, en el primer trimestre de este año logró reducir la incidencia delictiva. El homicidio bajó 0.3 por ciento; el secuestro, 25.8; robo de vehículo, 11.1; y robo en todas sus modalidades, 6.6, comparados con el mismo periodo de 2019.
En torno a la salud, reiteró que desde antes de la pandemia, “ya estábamos trabajando en mejorar el sistema de salud pública”, y dijo que actualmente se cuenta con seis mil 425 camas de terapia intensiva, con sus respectivos ventiladores, para atender a enfermos de coronavirus. Mientras que, a través de los Planes Marina y DN-III, “pronto se tendrá como respaldo mil 399 camas”.
Finalmente reconoció que, según los especialistas, “la parte más difícil de la epidemia está por llegar”; sin embargo, insistió que “saldremos adelante” sin miedo.
El dato: En Palacio Nacional sólo se observó entre los asistentes a la ceremonia a seis escoltas, una ama de ceremonias y a integrantes del equipo de la Presidencia.