Adiós al Pacto?
¿Cuándo México emerja de la crisis sanitaria y económica seguirá existiendo el pacto federal que nos amalgama como país?
La pregunta es pertinente ya que varios gobernadores de oposición amagan con retirarse del Pacto Fiscal porque en su opinión no tiene caso continuar si el gobierno federal les recorta año con año las partidas.
Romper ese pacto podría dar lugar a una crisis política que impactará en el otro pacto. Estamos hablando de estados como Guanajuato, Chihuahua, Durango, Coahuila, Tamaulipas y Querétaro. Es un asunto serio.
El presidente interino de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, reaccionó diciendo que los mandatarios de esos estados “no están midiendo las consecuencias que se pueden desatar en el país”.
Está bien que el dirigente de Morena alerte, estaría mejor que proponga a través de sus legisladores una salida concreta al problema, porque de soluciones no habla.
Trump, ¿buen samaritano?
Como hay demasiado petróleo en el mercado, la OPEP+ acordó que todos los países productores recortaran su producción para empujar al alza el costo del barril.
A México le pidieron reducir producción en 400 mil barriles diarios, pero lo rechazó. Después de horas de negociación, al país le tocó una reducción de apenas 100 mil barriles.
Se diría ante eso que fue una negociación fructífera, hasta que se conoce el segundo capítulo. Resulta que Donald Trump nos sacó las castañas del fuego y dijo que Estados Unidos recortará de su propia producción los 300 mil barriles diarios que le tocaban a México.
¿De cuándo acá Trump es un buen samaritano?
Al anunciar el acuerdo, el inquilino de la Casa Blanca dijo que después se lo reembolsaremos. ¿Cómo, cuánto, por qué?
El gobierno mexicano tiene que responder esas preguntas hoy mismo.
Protección inmediata
En lugar de disminuir se incrementan las denuncias de actos de violencia y discriminación en contra de trabajadores de salud comprometidos en el combate al Covid-19.
Es una conducta inadmisible y que se revertirá en contra de quien perpetra las agresiones.
El personal de salud tiene suficiente con atender a los contagiados, muchas veces en condiciones de vulnerabilidad, para además encarar las agresiones de la sociedad a la que protegen. No tiene sentido.
Las autoridades tienen que resolver este problema hoy mismo. Dotar a médicos y enfermeras de un transporte seguro o incluso de un lugar para dormir seguro en hoteles cercanos a los centros de salud, no es complicado. Requiere, eso sí, voluntad política y ganas de concentrarnos en lo relevante.
Los tres mosqueteros y Texas
Los gobernadores de Nuevo León, Jaime Rodríguez; de Tamaulipas, Francisco Cabeza de Vaca; y Miguel Riquelme, de Coahuila, siguen trabajando de manera conjunta en contra del coronavirus. A ellos hay que añadir al gobernador de Texas, Greg Abbot, que mantiene contacto cotidiano con sus pares mexicanos por medios digitales.
Los gobernadores de esos estados fronterizos se cansaron de esperar las indicaciones del centro y comenzaron a actuar por su cuenta en frentes como establecer una serie de hospitales móviles para evitar contagios en las clínicas y contar con un protocolo común para el tratamiento de los cuerpos de los fallecidos.
Ellos ya tomaron sus decisiones, falta ver qué hace el gobierno federal cuando los empareje.