¿Y los cargos en México?
Estremecedor y preocupante que, literalmente a ciegas, el gobierno crea los dichos de criminales confesos que, a cambio de beneficios carcelarios, profirieron absurdas imputaciones contra el ex secretario de Seguridad Genaro García Luna.
Con desprecio a la constitucional y civilizatoria presunción de inocencia, se azuza su linchamiento público usando a despreciables corifeos colados como “periodistas” en Palacio Nacional.
Pese a que se conocía ya el rotundo desmentido, un pobre diablo planteó: “Mi segunda pregunta viene a colación a (sic) las declaraciones de la ex embajadora de Estados Unidos en México Roberta Jacobson. Muchos de los voceros de esta prensa tradicional y caduca y otros actores nada dijeron…”.
Se refería a una entrevista publicada por un pasquín anticalderonista.
La señora había tuiteado:
Seamos claros sobre lo que dije, y siempre he dicho sobre el ex secretario García Luna: 1. Nunca vi ninguna información corroborada de participación en el tráfico de drogas; 2. En un ambiente de muchos rumores, uno siempre es cauteloso al trabajar con funcionarios. No hay historia de fondo o conspiración para ‘por qué ahora’. Las mismas respuestas que di hace meses cuando fue detenido. Un periodista decidió escribir una historia.
“Mi pregunta”, continuó el provocador, “es si esta declaración aporta jurídicamente algo a la investigación en México y si usted se pronunciaría porque el ex presidente Calderón deba (sic) rendir cuentas ante la justicia de los Estados Unidos”.
La respuesta presidencial comenzó de manera impecable:
“Corresponde investigar a la autoridad de Estados Unidos, es un proceso legal”.
Pero añadió: “Es muy lamentable que un secretario de Seguridad Pública esté al servicio de un grupo de la delincuencia organizada. Eso fue terrible, independientemente (de) si había complicidad hacia arriba o no”.
O sea que con los puros señalamientos de delincuentes y sin juicio aún, tiene ya su veredicto.
“Imagínense: el secretario de Seguridad Pública en el tiempo en que se decide declarar la guerra al narcotráfico, defendiendo, o protegiendo, a uno de los grupos para perseguir a otros (…). Entonces, sí amerita una investigación de fondo. No solo es corrupción, es asociación delictuosa entre gobiernos o entre funcionarios de dos gobiernos (…). Yo creo que el gobierno de Estados Unidos debería ir a fondo e investigar también a los funcionarios de la DEA, de la CIA, del FBI, a todos los que intervinieron durante este periodo, porque sin duda hubo cooperación, trabajaron juntos”.
Ajá. ¿Y por qué México no investiga o levanta cargos de nada?
“Rumores” como a los que alude Jacobson se propalan ahora sobre el actual secretario federal de Seguridad, como los que siempre suelen esparcirse contra los involucrados en el combate al crimen organizado.
A quienes inventaron el “fraude” de 2006 les obsesiona el ex presidente aludido.
Vale la pena leer lo que sobre el tema Jacobson-García Luna declaró Felipe Calderón a Ciro Gómez Leyva.