EL MEDIOCRE Y CORRUPTO DIRECTOR DEL IEBEM, FERNANDO PACHECO GODÍNEZ.
Hace algunas décadas, aparte de tener una plaza como inspector sin tener que asistir a trabajar y solamente estar por momento en la Sección 19 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), el hoy director general del IEBEM, Fernando Celerino Pacheco Godínez, era un crítico del sistema.
A principios de la década de 1990, Pacheco Godínez junto con el Senador perredista Fidel Demédicis Hidalgo y algunos otros personajes solían pretender hacer paros de labores en las escuelas, mítines y otras acciones en las que sus propios compañeros los consideraron locos, porque al final solamente ejercían acciones para beneficio propio.
Para mantenerlos callados, la disidencia magisterial solía tener más privilegios que los propios integrantes de los Comités de la Sección 19 del SNTE, porque además de ser unos auténticos aviadores contaban con recursos para asistir a reuniones con carácter internacional, aunque no asistieran a las mismas y se quedaran con el dinero.
El hoy director general del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), Fernando Pacheco Godínez, como el subsecretario de Educación Media Superior, Miguel Ángel Izquierdo, sabían aprovechar de este tipo de prebendas, al igual que el Senador Fidel Demédicis Hidalgo.
Este trío fue reconocido por sus propios compañeros como un grupo de “maestros corruptos”, quienes además manejaron secretarías importantes como la de créditos, tesorería y conflictos, desde las que negociaban hasta plazas para sus familiares.
Ni Fernando Pacheco, Miguel Ángel Izquierdo y menos Fidel Demédicis Hidalgo fueron los “luchadores sociales” que hasta el momento presumen, menos la honestidad que camina por el pueblo de Morelos.
Al contrario, la disidencia magisterial estuvo a punto de extinguirse y regresaron los viejos dirigentes, para salvar los pocos seguidores que quedaban del grupo de maestros que buscaban un sindicalismo diferente.
En la actualidad, con el Partido de la Revolución Democrática, en el gobierno de Morelos, la resurrección de Fernando Pacheco Godínez como de Miguel Ángel Izquierdo es la del viejo PRI, ahora ambos repudiados no sólo por el magisterio morelense también por los padres de familia.
El papel de ambos como autoridad es penoso, como de ministerio público contra las instituciones públicas y privadas cuyos, propietarios -en el caso de las últimas en mención- no coinciden con la “filosofía de la izquierda” suelen ser reprendidas, incluso hasta sancionadas con miles de pesos.
El repudio hacia ambos por su pésimo papel no es solamente de la disidencia magisterial, también de los llamados “institucionales”, de padres de familia y de estudiantes del nivel básico y medio superior.
Para la sociedad en general, el IEBEM hoy es una institución que solamente sirve para dar “chamba” a Fernando Pacheco Godínez y a Miguel Ángel Izquierdo, pero jamás para resolver los conflictos que hay en los planteles educativos del nivel básico y medio superior que dependen de éstos.
Fernando Pacheco Godínez para sus propios compañeros del magisterio es un servidor público mediocre, altanero, corrupto y sin capacidad de resolver un solo problema, por mínimo que le sea presentado.
La mediocridad de Fernando Pacheco Godínez como la de Miguel Ángel Izquierdo queda plenamente evidenciada en su capacidad de impedir paros, marchas y bloqueos de todo el magisterio morelense, quienes los conocieron -en su momento- como un par de grillos, corruptos y vividores.
En su momento, como parte de la dirigencia disidente de los profesores, Pacheco Godínez solía amenazar con la toma de escuelas, de instituciones del sector educativo a cambio de dinero, que a cambio le fue otorgado y después no pasó nada.
En la última década del siglo pasado estuvo en la nómina del IEBEM, siempre con plazas especiales y con un salario de envidia para sus propios compañeros maestros que diariamente estaban en las aulas y de frente a 40 ó 50 niños.
Los conflictos que hoy vive el IEBEM, son por la falta de conocimiento real del sector educativo por parte de su director general, tanto que al final del curso lectivo las quejas van en aumento y no hay soluciones próximas.
Sin embargo, como en el año 2009, el siguiente ciclo escolar podría dejar de iniciar y haber un gran paro magisterial apoyado por la sociedad, porque al momento como gobierno, el PRD no sirve y tampoco sus viejos “luchadores sociales” saben qué hacer en momentos de crisis, porque siempre solamente fueron gritones, de los que pegaban con la izquierda para cobrar con la derecha.