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TEMPLO MAYOR

¿CÓMO le explicarían a un extranjero lo que es el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en términos ideológicos? No es cosa fácil, dada la elasticidad (por no decir contradicción) entre los dichos y los hechos.

COSA DE VER que el Presidente se dice liberal, pero busca detentar un poder cuasi monárquico, sin contrapesos, en el que él mismo es el ideario, el caudillo y el narrador. Se cree de izquierda, pero actúa como un neoliberal puro al dejar a su suerte a la sociedad ante la pandemia. Que cada quien se cuide como pueda y coman frutas y verduras.

PARA COMPLETAR el coctel ideológico del Presidente, resulta que es un juarista evangélico, es el jefe de un Estado laico que recomienda a sus gobernados buscar el camino de la espiritualidad para enfrentar la pandemia más grande en un siglo. ¿Si una persona se contagia de coronavirus será por falta de fe? Es pregunta que sí distingue entre los asuntos que son de Dios y los que son del César.

ES RARO: el gobierno de la 4T tiene puestas sus esperanzas en la entrada en vigor del T-MEC, el 1o. de julio, pero al mismo tiempo no parece tomárselo muy en serio. Para comprobarlo, basta con el dato de que en el Capitolio ya tienen un detallado cronograma de acompañamiento para los próximos seis años y un presupuesto autorizado de 843 millones de dólares. En contraste, acá en México apenas están viendo convocar a un extraordinario para aprobar las leyes reglamentarias que hacen falta... a sólo dos semanas de que entre en vigor el acuerdo.

EL MEOLLO está en que, como advirtió el Consejo Coordinador Empresarial, el T-MEC no es una varita mágica para que lleguen las inversiones. Para eso se requieren, entre otras cosas, reglas del juego claras (y respetadas), un ambiente que propicie la competencia y no los monopolios estatales; y que el gobierno deje de creer que todos los inversionistas son enemigos en potencia.

VA A SER difícil borrar la frase que le gritaron a AMLO en su gira por Veracruz: "¡Sólo atiendes a la mamá del Chapo!". Y más porque, efectivamente, el mandatario parece tener mucho interés en no quedar mal con el crimen organizado.

CUANDO la madre del líder del Cártel de Sinaloa le pidió ayuda para tramitar una visa, puso hasta al canciller a ayudarle con el trámite. Hace un par de semanas, cuando la UIF le congeló cuentas bancarias al Cártel Jalisco Nueva Generación, el Presidente salió corriendo a aclarar que no fue cosa suya, sino petición de Estados Unidos. Y ayer, de nuevo, se dio tiempo para explicar que la supuesta captura de Nemesio Oseguera, "El Mencho", había sido un simple rumor.

Ámbito: 
Nacional