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EN PRIVADO

Fue el Presidente

Solo en estas crisis se entiende la verdadera fragilidad y valor de la vida.
Florestán

El pasado 17 de octubre se conoció la detención de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín Guzmán Loera, en su casa de Culiacán por elementos del Ejército con base en una orden de aprehensión con fines de extradición del gobierno de Estados Unidos acusado de narcotráfico, lo que terminó en un operativo fallido que llevó al gobierno a liberarlo después de que los brazos de la delincuencia organizada bloquearon la ciudad, coparon la unidad familiar de la zona militar, retuvieron a 11 militares, murieron 16 personas y se fugaron 56 reos, todo en medio de la confusión, la desorganización y el pánico de la gente.

El 22 de octubre, el presidente López Obrador declaró lo siguiente: Yo no estaba informado, no me informan de estos casos porque hay una recomendación general que se aplica.

Pero un cronograma presentado por el secretario de la Defensa Nacional el 30 de octubre apunta a que el gabinete de seguridad, que encabeza Alfonso Durazo, le informó de los hechos ese mismo día, a las 16:45 cuando estaba de gira en Oaxaca, que a las 19:49 se ordenó cancelar la operación, el retiro de las tropas y la liberación del detenido.

La noche de los hechos, el secretario Durazo dijo que durante una ronda de vigilancia habitual, los elementos de las fuerzas federales habían sido atacados por hombres armados desde la vivienda donde estaba Ovidio Guzmán, lo que al día siguiente se cambió por el fracasado operativo para detenerlo.

El Presidente también dijo que la decisión de cancelar todo fue del gabinete de seguridad y que él la respaldó.

Y con eso nos quedamos, tanto así que el 5 de noviembre Durazo compareció ante el Senado y bajo protesta de decir verdad repitió la versión del gabinete de seguridad, que quedó desmentida esta semana cuando el Presidente de la República reveló: Yo tomé la decisión de liberar a Ovidio Guzmán.

Esto exhibe a quienes faltaron a la verdad aferrándose a una falsa narrativa de una realidad que López Obrador develó ocho meses después: él dio la orden.

RETALES

1. SUSPENSO. El Senado sesionará lunes y martes de la próxima semana para aprobar las seis leyes antes de que entre en vigor el T-MEC el miércoles. No entiendo el irse a la víspera. En San Lázaro también y dicen que aprobarán los cuatro nuevos consejeros del INE;

2. GARANTE. López Obrador se autodeclaró ayer garante de la limpieza de las elecciones del año que viene, cuando no está facultado para ello, constitucionalmente es labor del INE y del Tribunal Electoral. Y es que no puede ser garante y parte; y

3. ENROQUE. Sin explicación alguna, que tampoco tiene porqué darla pues esa sí está entre sus atribuciones, el Presidente pasó a Rabindranath Salazar del Banco de Bienestar a la subsecretaría de Gobernación, y a Diana Álvarez Maury de este cargo al banco. ¿Los motivos? Solo él lo sabe.

Nos vemos mañana, pero en privado

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Nacional