Diputados: la oposición callada
Los partidos de oposición tienen todavía que explicar a sus votantes por qué, cuando se integró la actual Cámara de Diputados, en septiembre de 2018, dejaron que se torciera el sentido de los votos que habían recibido.
Por qué se dejaron arrebatar una mayoría que habían ganado en las urnas, mediante maniobras leguleyas cuyo resultado final fue instaurar en la Cámara de Diputados una mayoría anticonstitucional.
El silencio de las oposiciones ha sido en los hechos una forma de la complicidad, una forma de validar la manipulación de Morena y de su coalición. En el pecado han llevado la penitencia. Se han dejado poner en el lugar subsidiario y silencioso que ocupan, el lugar donde los quiere el gobierno, muy distinto del que les dieron los votantes.
Cinco millones de ciudadanos que votaron por López Obrador para Presidente, no votaron por Morena y su coalición para el Congreso. Votaron por los partidos que son hoy la oposición, los cuales recibieron 56.3 por ciento de los votos, la mayoría absoluta.
Los plomeros de Morena hicieron humo ese porcentaje de votos y convirtieron a la mayoría opositora en una silenciosa minoría. El silencio empezó entonces y dura hasta ahora.
Desde el primer momento, increíblemente, la oposición fue cómplice del fraude operado en su contra y contra la voluntad de los votantes. Se dejó convertir en minoría teniendo los votos mayoritarios. Esta oposición mereció a sus plomeros, pero está en deuda con sus votantes pues no hizo que sus votos contaran: los defraudó. Se dejó despojar y avaló el despojo con su silencio.
Creo que sus votantes merecen al menos una explicación de lo que hicieron. Y de lo que no hicieron: defender la democracia.
Se dice es que estaban todavía noqueados por la derrota. Que no vieron venir la maniobra hasta que estaba consumada. Que sus líderes estaban amenazados con persecuciones judiciales.
Camino a las elecciones que vienen, creo que a los ciudadanos les gustará saber qué pasó, por qué la oposición no defendió sus votos, por qué se hizo cómplice con su silencio de la manipulación de Morena y del nuevo gobierno en contra de los equilibrios de la democracia mexicana.