Trascendió
Que lo que sigue de sorpresa fue lo que recibió el nuevo titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Jorge Arganis Díaz, pues cuentan que encontró “una dependencia prácticamente desmantelada” y “ajena a los macroproyectos del Tren Maya y del Aeropuerto de Santa Lucía”, lo que en voz de sus colaboradores revela la distancia que ya había entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y el renunciante Javier Jiménez Espriú, más allá del diferendo por el traspaso del control portuario y aduanal a la Marina.
Que mientras la Unidad de Inteligencia Financiera que encabeza Santiago Nieto empieza a destejer la maraña de complicidades alrededor de Emilio Lozoya, que ya motivó el congelamiento de 16 cuentas con más de 120 millones de dólares por “transferencias irregulares”, los ex panistas Ernesto Cordero, Jorge Luis Lavalle y Javier Lozano negaron toda relación con los sobornos para aprobar la reforma energética en el sexenio peñista mientras que otro señalado, el ex candidato presidencial Ricardo Anaya, prepara su reaparición pública para aclarar lo que corresponda en este espinoso tema.
Que en Palacio Nacional debe haber asesores de distintas corrientes científicas, porque mientras el Presidente se empeña en sostener que sus consejeros dicen que no hay pruebas de que el cubrebocas ayude a evitar el contagio de coronavirus, como lo hizo ayer en Oaxaca al defender la estrategia de sana distancia, su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, sí usó el accesorio durante el acto por los 200 años de la Sociedad Pública de Lectura, al igual que sus acompañantes Claudia Sheinbaum y Natalia Toledo.