Que en el gobierno de la 4T tienen en la mira a José Murat Casab, ex gobernador de Oaxaca, por caso Lozoya-Odebretch, pues hasta hace poco el priista se presentaba como el “arquitecto” del Pacto por México y se ufanaba de ser el hombre elegido por el entonces presidente Enrique Peña Nieto para negociar, junto con Luis Videgaray y Miguel Osorio Chong, los acuerdos con la oposición. Los malpensados corrieron a leer su libro Pacto por México. De la reforma política de 1977 a la construcción de acuerdos para conocer los detalles de cómo operó Emilio Lozoya la aprobación de reformas estructurales. Se trata de un texto que circuló entre amigos y conocidos, pues si bien el político oaxaqueño pagó de su bolsillo para imprimirlo, nunca llegó a librerías.
Que ante los constantes ataques a la autoridad electoral y cuestionamientos al INE desde casi todos los frentes, el presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Felipe Fuentes, realizó una jugada de jaque mate con la plataforma digital para realizar juicios en línea. De esta forma se adelantó para evitar cualquier duda o acusación, pues por un lado evitó riesgos de contagio de covid-19 y, por el otro, garantizó la respuesta a aquellos que sientan sus derechos políticos bajo riesgo. Muy a la vanguardia.
Que Nayib Bukele, de El Salvador, es el presidente con mayor aprobación del mundo en medio de la crisis de covid-19, que hasta ayer había dejado más de 16 millones de muertes, de acuerdo con una encuesta realizada por Consulta Mitofsky en torno a 19 mandatarios de América y nueve de Europa, Asia y Australia. En ese listado, Andrés Manuel López Obrador aparece en el lugar siete, en el apartado de “alta aceptación”, por arriba incluso de Justin Trudeau y Donald Trump.