Así ablandaron a Lozoya
Muchos esperan que el exdirector de Pemex Emilio Lozoya Austin sea quien abra la caja de pandora de la corrupción del anterior gobierno, una vez que ha aceptado colaborar con la justicia mexicana. Sin embargo, nos dicen que poco se sabe de cómo se logró que él luego de estar prófugo y haber iniciado un combate legal para impedir su extradición de España acabara por aceptar su entrega a las autoridades mexicanas y acordar su colaboración en las investigaciones a cambio de obtener beneficios legales. En su entorno familiar nos comentan algunos datos de las presiones a las que fue sometido Lozoya. Primero, aseguran que pese a lo que se ha dicho en España, él sí tenía un estado de salud deteriorado. Segundo, que en Alemania, su madre, antes de que le fuera autorizado su arresto domiciliario, fue trasladada en varias ocasiones a distintas prisiones y que actualmente su esposa e hijos carecen de dinero para gastos básicos debido a que sus cuentas están congeladas. Tercero, que tanto sobre su esposa Marielle Helene Eckes y su hermana Gilda Lozoya Austin, pesan órdenes de aprehensión. Hoy Lozoya declarará por primera vez ante un juez mexicano y ya se verá si todo lo que se ha especulado que dirá es cierto, pues hasta ayer no había rendido ninguna declaración a autoridades nacionales en torno a los casos de corrupción de Odebrecht y Agronitrogenados. Hoy se sabrá qué tanto lograron ablandar a don Emilio.
El funcionario de la 4T que gana 100 veces más que AMLO
Vaya sorpresa que causa revisar la declaración patrimonial y de conflictos de intereses de Leonel Cota Montaño, secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, debido a que en la plataforma Declaranet reporta un salario 100 veces mayor que el que tuvo el presidente Andrés López Obrador en 2019. Nos detallan que en el documento, don Leonel señala que el año pasado tuvo un ingreso neto por su cargo por 153 millones 918 mil 953 pesos, es decir, una cantidad muy lejana a la que reportó el Ejecutivo federal quien informó un ingreso anual de un millón 567 mil 640 pesos. Nos comentan que seguramente se trata de un error, puesto que la plataforma no acepta poner puntos decimales. Nos hacen ver que lo importante —y lo que se espera— es que don Leonel tenga más cuidado cuando presente las cifras sobre los índices de violencia en el país, pues en esas sería inaceptable un error.
El genio que cree que San Luis Potosí tiene mar
Una cosa, muy mala por cierto, es que un funcionario público de alto nivel en un gobierno estatal reproduzca y comparta en sus redes sociales una noticia falsa. Pero es peor aún que ese funcionario ignore que el estado para el cual trabaja carece de playas. Es el caso de Aldo Torres Villa, secretario técnico del gabinete del gobierno de San Luis Potosí. Torres Villa compartió, días atrás, en su perfil en Twitter una imagen atribuida falsamente a esta casa editorial sobre la supuesta reapertura de playas en San Luis Potosí, que volvió a ser retomada en redes este fin de semana. Reproducir una noticia falsa es una irresponsabilidad. Ignorar que San Luis Potosí no tiene costas, y desde luego tampoco playas, pone en entredicho su capacidad para pertenecer al gobierno de su estado.
Director de Banobras no tiene temor de Dios
Nos comentan que de nueva cuenta, alguien del gabinete corrigió la plana al presidente Andrés Manuel López Obrador. El jueves pasado AMLO dijo que uno de los motivos para que regresara al país el avión presidencial TP-01 era porque no estaba bien resguardado. Incluso, detalló, estaba a la intemperie. Ayer en la conferencia de prensa en el Hangar Presidencial, Jorge Mendoza Sánchez, director general de Banobras, contradijo al mandatario al asegurar que el avión presidencial “se encuentra en perfectas condiciones, se ha hecho un gran trabajo de preservación y mantenimiento, incluso me atrevería a decir que, transcurrido un año siete meses, la aeronave se encuentra en mejores condiciones de como la recibimos”. Nos hacen ver que don Jorge ve el temblor y no se hinca, que está viendo la pandemia y no se pone cubrebocas, pues los últimos funcionarios que le llevaron la contra al Presidente ya no están en el gabinete.