Su estrategia, señalan, costó decenas de miles de vidas; el funcionario pide a quejosos seguir con la colaboración
Nueve de 10 gobernadores de la Alianza Federalista exigieron la renuncia inmediata del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, al acusar que con él sólo habrá más muerte; además, lo señalaron de ser responsable de la crisis actual y de actuar políticamente.
La organización difundió un comunicado avalado por los gobernadores de Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León y Tamaulipas.
Como respuesta, en conferencia nocturna desde Puebla y a pregunta expresa, López-Gatell indicó que no se trataba de 10, sino de nueve, puesto que el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, no avaló el documento, ya que el chihuahuense se deslindó casi de inmediato del texto.
López-Gatell, quien estuvo acompañado del gobernador poblano, Luis Miguel Barbosa, les reiteró su respeto e hizo un llamado a seguir trabajando en conjunto.
“Podemos entender sus sentimientos, que resulte más fácil identificar en el otro el desfogue de las inquietudes, pero seguimos expresando respeto, en tanto que son titulares de poder constitucional de las entidades y ojalá podamos seguir colaborando”, manifestó.
Mencionó que la pandemia significa una condición inusual y retadora y que tiene repercusiones sobre la vida, por lo que, dijo, es natural que los gobernadores tengan distintas percepciones que causen angustia y enojo ante la realidad.
Semáforo, la molestia
De acuerdo con fuentes consultadas, la molestia de los gobernadores inició desde el pasado 27 de mayo, cuando en una de las primeras reuniones virtuales, el funcionario sugirió que sólo existiera un semáforo epidemiológico para medir la pandemia; sin embargo, los mandatarios se opusieron y exigieron que la última palabra la tuvieran ellos, pues sus contabilizaciones eran más acertadas que las federales.
Otra de las inconformidades fueron las fallas en las predicciones de picos de la pandemia y de muertes, pero el enojo mayor se dio desde hace tres semanas, cuando se reveló el semáforo nacional y los gobernadores detectaron que operaba de manera desfasada, pues se alimentaba con cifras atrasadas.
La molestia más reciente sucedió este jueves, cuando López-Gatell amagó con imponer responsabilidades administrativas, civiles y/o hasta penales a quien no acate el color del semáforo federal.
Como respuesta, los gobernadores de Aguascalientes, Martín Orozco (PAN); de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme (PRI); de Colima, Ignacio Peralta (PRI); de Durango, José Rosas (PAN); de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez (PAN); de Jalisco, Enrique Alfaro (MC); de Michoacán, Silvano Aureoles (PRD); de Nuevo León, Jaime Rodríguez (independiente), y de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca (PAN), exigieron que se ponga al frente de la crisis a un experto que tenga conocimientos y humildad para entender en toda su dimensión los temas de salud.
En el pronunciamiento, los mandatarios externaron que la emergencia sanitaria exige un especialista con sensibilidad, inteligencia y sentido de responsabilidad, características que, dijeron, López-Gatell no tiene, pues lo demuestra con su información contradictoria.
“La receta del doctor López-Gatell ha tenido terribles consecuencias, pero sigue presumiendo que hay camas disponibles y que los hospitales no se saturaron como en Italia o Nueva York.
“Esta crisis que hoy se agudiza y que no tiene un final a la vista, sin duda, es responsabilidad de quien ha dirigido y decidido la estrategia de contención y atención, quien optó por el uso político de la gestión de la epidemia antes que privilegiar la vida y la salud”, destacaron.
Desde Jalisco, el gobernador Enrique Alfaro afirmó que el subsecretario López-Gatell dijo que ya no cuenta con el respaldo ni la confianza de los gobernadores a quienes ahora “quiere culparnos de su mediocridad e irresponsabilidad”.
El mandatario jalisciense calificó como un despropósito más del subsecretario de Salud la advertencia lanzada contra los gobernadores de sancionarlos conforme a lo previsto en la Ley General de Salud, en caso de que decidan cambiar el semáforo epidemiológico local.
Amago federal
Como lo informó EL UNIVERSAL, este jueves hubo un choque entre el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, y la mayoría de los 32 gobernadores del país, debido a que desde el gobierno federal se les amagó con imponerles el semáforo epidemiológico nacional y, de no acatarlo, podrían hacerse acreedores a sanciones civiles, administrativas y hasta penales.