Todo esto lo iniciaron Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya, quienes decidieron ponerse en tooodos los anuncios de sus partidos y los dos quieren ser candidatos a la Presidencia —bueno, uno ya lo es— para el 2018.
Ahora, los dos son presidentes de sus partidos y si en ellos a nadie le molesta y los dejan hacerlo, pues por lo pronto, cosa de ellos.
Con otros suspirantes que hoy avizoran puestos públicos la cosa cambia.
Dice la Constitución en su artículo 134:
“La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público” (negritas mías).
Después de aprenderse ese párrafo, échele usted el ojo a las páginas de Facebook de algunos suspirantes.
En la página de Meade se sube después de cada evento un video de unos cuantos minutos, muy bien editado y musicalizado, con la voz del secretario contando cuántas becas dio, cuántos apoyos, cuántos comedores, cuántos afiliados al IMSS. Pura cosa buena. Las imágenes: Meade aplaudido, Meade abrazado, a Meade le echan porras los beneficiarios. Meade siempre está feliz. Al final una voz dice entusiasta: “José Antonio Meade, secretario de Desarrollo Social”. En la pantalla, sobre verde, el nombre del secretario y su puesto. Sus cuentas personales de Twitter y FB. El gobierno federal, ni aparece.
Miguel Ángel Osorio hace menos videos, más fotos y en los que hace al menos tiene el detalle de poner el Escudo Nacional y la leyenda “Secretaría de Gobernación”. Pero eso sí, mucho Osorio, siempre muy generoso con el país.
Ahora, si quieren disfrutar no se pierdan el de Graco Ramírez de “beca salario”. Un estadista aplaudido por los jóvenes. Nomás faltaba. Y qué decir de Moreno Valle que se hace entrevistar para contarnos lo maravillosa que ahora es Puebla… y él.
Creo, sin embargo, que todos deberían pedir el dato a Meade de quién hace los suyos. Mucho mejores.
Mientras, yo vuelvo a leer el 134 constitucional.
Y me quedo con una duda más que razonable.
Twitter: @puigcarlos