La trágica meseta de López-Gatell
Dice la RAE que una meseta es la planicie extensa situada a considerable altura…
Dijo López-Gatell desde hace mucho que debíamos prepararnos para una epidemia larga, porque así se había decidido la estrategia de este gobierno y dio sus argumentos basados, sobre todo, en el estado del sistema de salud y la voluntad de que no se saturaran hospitales. Y dijo también que tendría que ser larga porque las medidas de mitigación serían, en su mayoría, voluntarias para la población y menos estrictas que en otros países por dos razones: la económica —la gente no podía quedarse en su casa por necesidad de tener ingreso—, y según él por la posibilidad de violaciones a los derechos humanos.
Todo eso ha traído a un país medio paralizado por ya casi seis meses, con un número nacional de contagios y muertes que nomás se ha estancado en los mismos promedios semanales desde hace algunas semanas, como el mismo López-Gatell dijo el viernes pasado en la conferencia de prensa. Y no, no son rebrotes, porque el brote inicial se ha quedado atorado, la curva se volvió plana… No quiero ver qué pasará cuando algunos semáforos en ciudades grandes pasen a amarillo o verde; será por eso por lo que el subsecretario ya comenzó a insinuar lo del mes de abril.
¿Se saturaron los hospitales? Pues no, o no como en otros países. Pero el trágico número de muertes (el de aquellos que tuvieron prueba covid-19 y aquellos que no tuvieron prueba de confirmación) pareciera indicar que miles han muerto en casa o han llegado muy tarde al centro de salud. Y que cada vez que hablábamos de espacios libres en un hospital alguien sufría en su cama.
El número récord de profesionales de la salud que han caído como héroes y el brutal agotamiento de los que siguen dando la batalla en la meseta interminable anticipan malas semanas para todos y los contagios que no ceden o ceden a paso de tortuga...
¿Y la economía? El otro objetivo de la estrategia López-Gatell. Los datos del Inegi para junio (nueva normalidad) de consumo e inversión fija bruta confirman lo que otros han dicho. La crisis es de magnitud no vista.
Al final, cuando esto tenga final, la evaluación de la estrategia tendrá que medirse, sí con saturación hospitalaria, pero sobre todo con muertes, contagios y su control y consecuencias económicas.
No tengo claro que esta meseta eterna ayude.
@puigcarlos