Cuernavaca, Mor., Al cumplirse ayer nueve días del multihomicidio perpetrado durante un velorio en la colonia Antonio Barona, en Cuernavaca, familiares de las víctimas exigieron al gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, y a la Fiscalía General del Estado (FGE), el esclarecimiento del ataque que dejó un saldo de nueve personas muertas y que dejen de tratar el caso como un enfrentamiento entre criminales.
Los jóvenes asesinados, de entre 15 y 31 años, dijeron sus familias, estudiaban secundaria y preparatoria y otros trabajaban. Por ello, pidieron a las autoridades que dejen de presentar el crimen como "un ajuste de cuentas"; además, recordaron, el funeral era de un adolescente que se accidentó en una motocicleta.
"No fue un enfrentamiento, sino una masacre y un acto terrorista contra nuestros hijos. Ellos sólo se despedían de un amigo de su infancia", expresó Daniel Jiménez, padre de Daniel Jiménez López, de 16 años, uno de los acribillados.
En rueda de prensa, en la colonia Antonio Barona, las familias también pidieron al titular de la FGE, Uriel Carmona; al delegado en Morelos, Hugo Éric Flores, y al diputado federal Jorge Argüelles que se deje de criminalizar a los jóvenes ultimados el primero de septiembre.
Los padres denunciaron que la FGE no les ha informado cómo van las investigaciones, por lo que instaron a dar resultados cuanto antes y detener a los responsables.
"Queremos que el gobernador Cuauhtémoc Blanco dé la cara, que él mismo nos informe qué están haciendo para dar con los responsables del crimen y qué planes tiene para la colonia. Queremos que hable con nosotros, como cuando anduvo en campaña", agregó Jiménez.
Piden apoyo para huérfanos
Martha Zully Vargas, madre de Aylin Sherezada, de 25 años, quien murió en el velorio, pidió a las autoridades apoyo para que sus tres nietos, hijos de Aylin, reciban becas, pues el padre de los niños resultó herido en el ataque. "Mi hija dejó tres niños pequeños, de uno, tres y seis años".
Narró que Aylin acudió con su esposo al velorio de Arath, pero al salir "se toparon con la lluvia de balas. Afortunadamente mi yerno no murió".