Incognitapro

COORDENADAS

¿Tendrá fuelle la recuperación?

La recuperación de la actividad económica en México es un tema de ‘fuelle’.

En los deportes, se habla, por ejemplo, de que los corredores ‘pierden fuelle’ cuando en cierta fase de la carrera, ya no tienen fuerza para mantener el ritmo al que van y empiezan a correr con mayor lentitud.

A veces se habla también del agotamiento o de la fatiga. Eso será la clave para saber realmente cuánto más puede crecer la actividad económica en nuestro país.

Le pongo un ejemplo relacionado con cifras que el INEGI dio a conocer el día de ayer.

Las exportaciones no petroleras de México crecieron 4.3 por ciento en agosto con relación a las de julio. Pero en julio habían crecido 11.3 por ciento respecto a junio y en junio, 77.7 por ciento respecto a mayo.
PUBLICIDAD

Claramente observamos un efecto de rebote tras activarse la industria manufacturera, y luego de haberse producido dicho efecto, se empieza a perder fuerza.

Si comparamos las cifras de agosto contra las del mismo mes del año pasado, observamos una caída de 4.7 por ciento.

Si en septiembre las exportaciones no petroleras crecieran otro 2 por ciento adicional respecto a agosto, ya estarían en los mismos niveles del año pasado.

¿De qué va a depender eso? Básicamente de lo que suceda con la industria en Estados Unidos.

El dato de agosto mostró un crecimiento de apenas 0.4 por ciento respecto a julio y se percibe que la actividad industrial está perdiendo fuerza.

Los pedidos manufactureros en septiembre subieron ligeramente en Estados Unidos, lo que podría anticipar una mejor cifra de actividad en septiembre. Pero, es muy pronto para llegar a esta conclusión.

Ayer, el INEGI también dio a conocer las cifras del empleo en México correspondientes al mes de agosto. En ellas se observa un incremento de 653 mil personas activas respecto al mes de julio.
PUBLICIDAD
Ads by Teads

De ese incremento, 467 mil corresponden a empleos informales, lo que quiere decir que trabajadores de este segmento están retornando poco a poco a su actividad, para sumar ya 27.8 millones, cuando en abril la cifra había caído a 20.7 millones.

Los datos parecen confirmar que la recuperación del empleo continúa, pero también nos hablan de esa pérdida de fuerza cuando, por ejemplo, refieren una pérdida de 1.4 millones de ocupaciones en el sector comercial en agosto.

Las cifras del IMSS indican que, en materia del empleo formal asegurado al Instituto, la recuperación es más débil. En agosto se recuperaron 92 mil 390 puestos de trabajo, que equivalen al 8.3 por ciento de los empleos perdidos entre marzo y julio.

En el conjunto, ya se han recuperado, según el INEGI, aproximadamente las dos terceras parte de las ocupaciones perdidas desde abril, tras el confinamiento.

Aunque los datos son positivos, muestran una dinámica del empleo altamente diferenciada y aún con fragilidad.

Para tener una recuperación consistente del empleo sería necesario que la recuperación no fuera solo por efecto de la reapertura de la actividad económica, sino también como producto de una nueva dinámica.

Ya se anunció ayer que ahora sí, el programa de infraestructura, que incluye proyectos del sector energético, se anunciará el próximo lunes.

Veremos si ese programa tiene la solidez como para generar señales suficientemente fuertes que incentiven la inversión en los próximos meses.

La nota dominante hoy es el escepticismo tanto por la posposición recurrente de este programa, como por decisiones diversas, sobre todo en el sector energético, que muestran una clara aversión a la inversión privada.

Solo queda el beneficio de la duda.

Ámbito: 
Nacional