1. Irresponsables. No sólo la pareja que decidió invitar a 300 personas a su boda en Mexicali, Baja California, sino las mismas autoridades son responsables de que 100 de esos invitados se hayan contagiado de covid-19, cuando en todo el país la emergencia sanitaria tiene en vilo a la población. Y lo peor es que serán la Secretaría de Salud y la fiscalía estatal quienes determinen si existe o no sanción. La presidenta municipal, Marina del Pilar Ávila Olmeda, mencionó que al municipio no le corresponde emitir alguna sanción por este evento, ya que se realizó en un domicilio al interior de un residencial privado de la localidad, y que este asunto ya está en manos del Sector Salud y de la FGE, quienes determinarán alguna amonestación, de ser el caso. ¿Y Jaime Bonilla, el gobernador, pondrá cartas en el asunto?
2. Tiempo perdido. Una vez que el Senado autorizó la eliminación de fideicomisos, los gobernadores miembros de la Alianza Federalista, Silvano Aureoles, Javier Corral e Ignacio Peralta, y representantes de la Alianza Federalista, se reunieron con los coordinadores de los grupos parlamentarios que constituyen el Bloque de Contención del Senado, integrado por PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, para “una profunda discusión sobre el destino de 109 fideicomisos y fondos públicos”. Coinciden en que su desaparición no sólo se trata de una acción de confiscación y centralización de recursos, sino que atenta contra la autonomía de organismos públicos y se basa en un discurso descalificador, estigmatizante y con fines políticos y divisorios. El gobierno los veía como boquetes para fuga de recursos. ¿Quién miente?
3. Cumplidores. La Secretaría de la Defensa Nacional destruyó, en la octava Zona Militar de Reynosa, un arsenal que le fue decomisado al crimen organizado que opera en la frontera de Tamaulipas. La ceremonia se realizó ayer, con la diferencia de que no todas las autoridades estuvieron presentes por respetar los protocolos de seguridad por la contingencia contra la pandemia. Los oficiales procedieron a destruir el armamento. En total fueron mil 380 armas de diferentes calibres, 11 mil 940 cargadores y 323 mil 977 cartuchos útiles. El arsenal forma parte de los decomisos que las autoridades han realizado al crimen organizado que opera en la frontera de Tamaulipas y ocurrió dentro del Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024. El general Luis Crescencio Sandoval, en lo suyo: servir a la nación.
4. El colmo. En el 67 aniversario del reconocimiento al derecho al voto femenino en México, Olga Sánchez Cordero, la secretaria de Gobernación, afirmó que México no podrá alcanzar una democracia plena si las mujeres no logran conquistar mayores espacios de poder y decisión. Al participar en la serie de diálogos que organizó el Museo de la Mujer, la funcionaria reconoció, en su caso particular, obstáculos dentro de sus distintas responsabilidades por motivo de género. De hecho, acusó haber sufrido de “misoginia” en la actualidad, durante las reuniones del gabinete de seguridad, cuyos integrantes, todos, son hombres. Un rechazo a sus comentarios, aunque estuvieran correctos, dijo. Por supuesto, “que dentro del gabinete hay temas de misoginia muy considerables, desde luego”, agregó. Un punto para ajustar.
5. ¿Justicia ejemplar? Siempre se ha puesto como ejemplo de civilidad el aparato de justicia estadunidense. Alexander F. MacKinnon, juez encargado del caso contra el general Salvador Cienfuegos, acusado de colaborar con el narco, determinó negarle libertad bajo fianza, luego de que su defensa la solicitara a cambio de un pago de 750 mil dólares. En una audiencia virtual, el juez dijo que el militar representa riesgo de fuga y deberá permanecer en custodia. “Se debe ordenar la detención del acusado hasta que se celebre el juicio”, indicó, después de escuchar argumentos de la fiscalía y del abogado defensor. El magistrado infirió que debe tener “contactos” que le ayuden a huir. Parecen rudos, pero hay quien asegura que México no sería capaz de juzgarlo como lo hacen allá ahora. ¿Será?