¿Hasta dónde llegarán los gobernadores?
Frente a los recortes contemplados en el presupuesto del año que viene de gasto para las federaciones, los gobernadores de la Alianza Federalista hicieron ayer eventos en sus estados, convocando a varios actores de las entidades para protestar, volver a llamar al diálogo con el gobierno federal y advertir que acudirán “a otras instancias”.
Javier Corral, de Chihuahua; Miguel Riquelme, de Coahuila; José Ignacio Peralta, de Colima; José Rosas Aispuro, de Durango; Diego Sinhue, de Guanajuato; Enrique Alfaro, de Jalisco; Silvano Aureoles, de Michoacán; Jaime Rodríguez, de Nuevo León, y Francisco Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, organizaron eventos que, transmitidos en redes sociales y en algunas televisoras locales, al menos cambiaron la forma en sus reclamos al Ejecutivo y dieron la palabra a otros: presidentes municipales, legisladores, empresarios, académicos y científicos.
Los discursos de ayer son una buena muestra de lo roto que estaba el pacto fiscal desde hace muchos años en México, sobre todo por su discrecionalidad y el verdadero poder de la Secretaría de Hacienda, a la que tenían que desfilar cada año los gobernadores para rogar por recursos no definidos por la ley.
Arreglarlo requeriría una mesa de diálogo, a la que el Presidente no parece dispuesto o al menos no lo ha estado.
Como lo saben, los gobernadores advirtieron: “No queremos pelear, pero tampoco vamos a permitir que nos atropellen. Estamos listos para dialogar y construir acuerdos, pero también estamos listos para dar la batalla política jurídica si es necesario”, dijo Alfaro.
Aureoles: “Si no hay diálogo y respeto entre el gobierno central, los estados y municipios, se marcará el inicio del rompimiento del pacto federal”.
El Bronco: “Pretendemos un pacto federal mucho más fuerte, poderoso, no un pacto debilitado como está actualmente, en el que de manera unilateral se toman las decisiones. Si no lo acepta, la Federación iniciaría una confrontación innecesaria”.
Frente a un gobierno empeñado en centralizarlo todo habrá que ver hasta dónde están dispuestos a llegar los 10 gobernadores que, ahí está el problema, siguen dependiendo del gobierno central para cubrir los faltantes en estos tiempos de crisis.
@puigcarlos