Paco de Cuerna...
El señalado como misógino y presunto ladrón del Congreso de Morelos, Francisco Moreno Merino, pese al rechazo social de que es objeto, y tras haber sido despedido de la delegación federal del PRI en Quintana Roo, inició una campaña en las redes sociales para tratar de posicionarse y fortalecer su deteriorada imagen con miras a buscar ser el candidato a la alcaldía de Cuernavaca.
EL CATEDRÁTICO DE LA UNAM.- Su estrategia, que no está nada mal, saca lo mejor de su persona. Es más, presume ser catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México e intenta hacer creer a la sociedad que es una persona honesto, decente, pulcro, transparente y con la firmeza suficiente para resolver los problemas que hay en la capital ya que jura y perjura, que él, Paco Moreno, el político, junto con la sociedad puede hacer mucho más por Cuernavaca porque asegura tener “el remedio y el trapito para hacerlo”.
Paco Moreno, insiste en mentir al tratar de hacer parecer lo que no es, sólo en caso de llegar a ser el alcalde de Cuernavaca, asegura que habría “cero tolerancia a la delincuencia; firmeza en sus acciones así como finanzas públicas claras y transparentes”, porque buscaría ayuda de organismos internacionales como sucede con el Banco Interamericano de Desarrollo. Incluso, argumenta -que la sociedad- debe de pensar con seriedad en Cuernavaca y no solamente en una persona que sea simpática o famosa –sin decir nombre de a quien se refiere, no le gustan los problemas-. Y da a entender que el próximo alcalde debe ser, una persona con experiencia, arraigo y que viva en la ciudad para que los beneficios sean para la gente de la capital y pueda organizar, incluso, una administración pública más eficiente, ofreciendo que sería multipartidista y multi-ideológica con los mejores y no solamente con los amigos.
Lo que no dice Paco de Cuerna, es que hace una década, para ser exactos el 20 de marzo del año 2010, se quedó mudo, jamás quiso decir informar ni declarar que fue lo que pasó en el ataque que sufrió en su casa de gestoría, precisamente cuando él era diputado federal del PRI por el primer distrito electoral en Morelos. Cabe recordar que en esa época, al menos 10 sujetos no identificados que viajaban en camionetas tipo Suburban de color negro y sin placas, balearon la que era su casa de gestoría aproximadamente a las cuatro de la madrugada; tras varios disparos sobre la residencia ubicada en el número 6 de la calle Cantarranas de la colonia Quintas Martha en Cuernavaca. Afuera de la propiedad donde era la casa de gestoría del entonces diputado federal priista Francisco Moreno Merino, fueron encontrados al menos 100 casquillos percutidos de AK-47, además de que en el interior de la vivienda fueron quemadas algunas cuestiones personales de la propiedad.
Además de que fue justamente en aquella fecha, cuando el exsenador perredista –y posterior gobernador perredista- Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, habría pedido investigar el “rápido enriquecimiento” de Moreno Merino, porque en ese tiempo presumió que “hay algo detrás de él”.
EL SAPAC Y EL CORONAVIRUS.- Algunos servidores públicos municipales como la síndico, Marisol Becerra se han integrado a la larga lista de políticos contagiados por el coronavirus, sin embargo, en algunos lugares como en el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca, son los propios trabajadores los que han informado que sus “jefes” dejaron de ir a laborar porque al parecer se encuentran confinados en sus hogares derivado de que también sufrieron del contagio del siglo. Dicha decisión de resguardarse es un acto de responsabilidad al que le agradecemos cuya finalidad es la de mejorar su estado de salud y evitar más contagios del covid. Empero, lo triste, lamentable y preocupante es que la directora del organismo, Yarely Jaimes García, haya llegado a una dependencia que en los últimos años ha sido señalada -y con elementos contundentes-, de estar infiltrada por los malosos, de ser una institución donde se hacen negocios diversos de forma ilícita y de mantener aviadores en la nómina por lo que ha sido un lastre el SAPAC, razón por la cual, el servicio que ofrecen es más que pésimo. El hecho de que varios jefes del órgano operador estén contagiados ha evidenciado un mal servicio de distribución del agua potable, porque varias colonias hoy en día se han quedado sin agua y ahí solo entienden mediante bloqueo de calles, avenidas y cierre de la dependencia para hacer caso y entender de la problemática que padecen los afectados. Y es que para muchos, es un acto grosero que atenta contra los intereses de los derechohabientes que mientras ellos estén haciendo su negocio redondo y cobren el servicio sin dar la prestación, todo se mantendrá igual.
Peor aún, en varias colonias de Cuernavaca se sigue careciendo del vital líquido que en estos tiempos de pandemia es una acción criminal, porque el SAPAC contribuye a que muchas personas puedan contagiarse del coronavirus, en razón de que no hay forma de cómo lavarse constante y permanentemente las manos con agua y jabón, tal como lo ha instruido el gobierno federal a través de la Secretaría de Salud si carecen del agua. Esta instrucción tal parece, la están acatando los gobiernos estatal y municipal de Cuernavaca, sin embargo, el órgano operador no brindar el vital servicio a la comunidad lo que evidentemente que los orilla a que puedan ser presa de la pandemia en cualquier momento. Todo hace indicar que hasta el momento no le ha caído el 20 a la directora o quizá sea que porque ella no está en esa situación al recibir su tandeo de agua sin problema las 24 horas en su hogar, poco o nada le preocupa. Lo cierto, es que alrededor de 30 días siguen padeciendo sin agua los vecinos de la colonia Lomas de Tzompantle, y pese a lo preocupante, ofensivo e inhumano del caso, además pasará el puente del Día de Muertos y no habrá servicio. Triste por lo que sucede en el SAPAC pero peor aún, el desinterés, el valemadrismo y la omisión en la que incurre su titular, Yarely Jaimes García.
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