Tonalá, o Irapuato, o Camargo o la próxima masacre
Han contado los vecinos del lugar en que asesinaron a 11 personas en Tonalá que fue de repente que se escucharon numerosas detonaciones; muchos pensaron que eran fuegos artificiales.
Eran poco más de las seis de la tarde, la hora de los sábados en que algunos de los que viven en la calle de Rusias Negras esquina con Emiliano Zapata se juntan en la baqueta para abrir unas cervezas y conversar y divertirse al final de una semana, como todas, intensa. Eran tranquilos, dijo un vecino a los diarios de Jalisco.
Once cuerpos sin vida quedaron tirados en la calle. Un menor de edad herido debajo de una camioneta, donde se había escondido. Los muros salpicados de sangre. Tonalá, Jalisco. Febrero de 2021.
Todas las mañanas a las seis de la mañana, el gabinete de seguridad del gobierno se reúne en Palacio Nacional encabezados por el Presidente de la República. En esa reunión se presenta un documento que se hace público unas horas después y que da cuenta de los homicidios que hasta ese momento ha recabado el grupo interdisciplinario que asiste a la reunión.
En 2019, el promedio de homicidios diarios según ese conteo fue de 78.6; en 2020 fue de 79.2, en estos dos meses ha sido de 77.1. El 26 de febrero, un día antes que el Presidente llegara a Zacatecas, hubo 17 asesinatos en el estado, 20 por ciento de los ocurridos en todo el país.
Un par de días antes en la mañanera, el Presidente había dicho, como presumiendo, que “ya hay estados en donde se tienen más elementos de la Guardia Nacional que policías estatales, y esto lo hemos hecho en muy poco tiempo, en año y medio”.
Van unas dudas que pienso son razonables: Si llevamos dos años (de hecho, llevamos más) con despliegue nacional de elementos federales —Ejército, Marina o GN— y el trágico número de homicidios diario, muchos de ellos producto del crimen organizado, no se mueve; ¿será que esa estrategia no está funcionando?
Y si seguimos leyendo crónicas y reportajes de zonas donde mandan los grupos criminales (https://bit.ly/3uEDfoJ) y el Estado no existe; y si siguen las masacres…alguien en esa reunión tempranera sugiere que a lo mejor algo no funciona. O solo habrá que espera la próxima masacre…y como llevamos desde 2006, haciendo la cuenta de los muertos.
@puigcarlos