La muerte de la República amorosa
Llamo a todos los mexicanos a la reconciliación y a poner por encima de los intereses personales, por legítimos que sean, el interés general. Como afirmó Vicente Guerrero: ‘La patria es primero.’
El nuevo proyecto de nación buscará establecer una auténtica democracia. No apostamos a construir una dictadura abierta ni encubierta. Los cambios serán profundos, pero se darán con apego al orden legal establecido”.
Estas fueron las palabras con que Andrés Manuel López Obrador comenzó su discurso de aceptación por el triunfo logrado en las urnas el domingo 2 de julio de 2018.
Hoy que, en México, están bajo metralla pilares fundamentales de la legalidad y la democracia, aquel memorable mensaje parece haber sido expulsado del cerebro presidencial.
Síntomas de deterioro se suman día con día. Apenas la semana pasada, con el desconocimiento de una inmensa mayoría de senadores y violando con indolencia la Constitución, el partido del Presidente votó extender el mandato de Arturo Zaldívar Lelo de la Rea como titular del Poder Judicial de la Federación, sin importar que con ello se haya sometido a la Corte a una presión atómica que podría hacerla volar por los aires.
Aquel mensaje parece haber sido expulsado del cerebro presidencial
Cuerpo.....
Tres días después —arrojando por un barranco el proceso electoral en curso— la fracción parlamentaria de Morena confirmó que promoverá un juicio político contra el presidente de Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, porque, a su parecer, el funcionario no proporciona garantías para unos comicios democráticos.
Antes, López Obrador también fustigó con desproporción el trabajo de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), y propuso eliminar casi a todos los órganos constitucionales autónomos, excepto el Banco de México.
A juzgar por lo que está ocurriendo, diera la impresión de que el llamado a la reconciliación tuvo como autor a otro personaje, el mismo que traicionó la promesa de colocar el interés general por encima de los intereses personales. Cabe dolerse de que, en México, el orden legal esté dejando de ser la ruta para los cambios profundos y, sobre todo, que la patria no sea ya lo primero, sino la disputa feroz por la nación.
Zoom: ¿Dónde quedó la República amorosa? Es momento para que la nación se lo demande.
Ricardo Raphael
@ricardomraphael