Nuevo embajador de EU, cabildero de petroleras
La Casa Blanca propuso como embajador de Estados Unidos en México a un representante abierto y declarado de los intereses de la industria energética de su país.
El nombramiento de Kenneth Lee Salazar es un mensaje claro y preciso frente a una controversia que implica a empresas extranjeras dedicadas a la explotación de hidrocarburos en México.
Ha sido un defensor contundente del fracking y un militante contra la regulación de la extracción de petróleo y gas respecto de diversas restricciones ambientales que pretendieron limitar a ese sector en Estados Unidos.
En 2013, Salazar se integró a la empresa cabildera WilmerHale, representante de British Petroleum (BP) después de la explosión que en 2010 produjo un derrame de millones de barriles de petróleo en el Golfo de México.
Los adversarios de este antiguo funcionario del gobierno de Barack Obama criticaron fuertemente a Salazar por proteger a BP respecto a las investigaciones que hace más de una década se emprendieron en su contra.
Se rumora que su salida del gobierno, en aquel entonces, se debió al conflicto de interés que implicaba su cercanía política y financiera con esa y otras compañías.
WilmerHale ha sido también cabildera de Chevron y Satatoil. Desde hace varios años Chevron ha invertido de manera importante en el Golfo de México y Statoil participó en las rondas de subasta realizadas en México después de la reforma energética de Enrique Peña Nieto, y tiene inversiones por más de 700 millones de dólares en el Golfo de México.
No encaja el perfil del futuro embajador estadunidense con la agenda en materia energética del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el cual se ha declarado abiertamente en contra del fracking y también en contra de la reforma energética que, a partir de 2013, abrió la puerta para que empresas como las representadas por Salazar invirtieran en la extracción de hidrocarburos en suelo mexicano.
Zoom: no es una mera coincidencia el nombramiento de Salazar. A través suyo, Joe Biden envía señales contundentes a propósito del papel que jugará su gobierno en la defensa de los intereses de las empresas energéticas estadunidenses que han invertido en el país. Una nueva partida en la relación bilateral está por comenzar.
@ricardomraphael