Para eso es un Informe presidencial
Hay división en la unidad y unidad en la división.
Florestán
Cuando han transcurrido 33 meses de gobierno, en la víspera de su tercer Informe, el presidente López Obrador afirmó que tiene la conciencia tranquila y que por lo avanzado en este tiempo, ya puede irse tranquilo.
Esa es la visión que tiene de su gestión, lo que no es compartido por todos pero sí por 60 por ciento que le mantiene el respaldo original.
Pero ese es el tono del mensaje que leerá hoy en la sede legislativa juarista de Palacio, al lado de la misteriosa silla vacía que siempre pone.
¿Qué esperar de este Informe? El mismo ejercicio de los que le antecedieron: un recorrido triunfal por lo avanzado en este tramo de gobierno, que lo tiene con la conciencia tranquila, resumen de logros que repite en la mañanera y que ha adelantado en los spots: sus programas sociales. No habrá autocrítica, como tampoco la hubo en sus antecesores.
Sin embargo, aunque no lo consigne así, y tenga otros datos, hay temas centrales que registran pasivos: violencia, los homicidios dolosos superarán los 100 mil a finales de mes; pandemia, con unos 500 mil muertos y 30 millones sin una sola dosis de vacuna; pobreza al alza, de acuerdo a Coneval y recuperación económica que, de darse, será el año que viene.
Hoy, pues, dará su versión, siempre ha sido un derecho presidencial, que para eso es un Informe, pero no en todos los casos retratará la realidad, que para eso es, también, un Informe.
RETALES
1. REALIDAD. Delfina Gómez dijo el viernes que volverían a clases en 90 o 95 por ciento de las escuelas, predicción muy lejana a la realidad, siempre necia. De las 262 mil 805 que hay (46 mil 675 privadas), abrieron 119 mil 497, 45 por ciento, muy distante de sus proyecciones. No entiendo el ejercicio de presentar las cosas ideales cuando la realidad los desmiente. Y así engañan, aunque brevemente;
2. REITERACIÓN. Alejandro Díaz de León, gobernador del Banco de México, confirmó lo que le había adelantado sobre el anuncio del Presidente de utilizar para pagar deuda los Derechos Especiales de Giro por 12 mil 131 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional. Por mandato constitucional, no puede tocar las reservas que ayer alcanzaron un máximo histórico de 205 mil millones de dólares. Si quiere divisas, que Hacienda se las compre al Banxico; y
3. REVOCACIÓN. Mario Delgado insiste en la ratificación de mandato, aunque niegue la reforma constitucional sobre la revocación que él mismo aprobó. La pregunta deberá ser aprobada por el INE, la Corte es ajena, a menos que se presente alguna controversia sobre la ley reglamentaria. La pregunta propuesta supone ratificación, no revocación, aunque el resultado mayoritariamente será ese, la ratificación de la presidencia de López Obrador. Pero hay formas, en este caso, constitucionales.
Nos vemos mañana, pero en privado
Joaquín López-Dóriga
@lopezdoriga
lopezdoriga.com