'¿De qué se ríe el Presidente? '
Contra lo que supongan muchos, a no todos los machuchones del dinero les incomoda la gestión del presidente López Obrador.
De varios grandes empresarios que respaldan la gestión de Andrés Manuel López Obrador procede el texto que uno de ellos me compartió y que tiene un sugerente primer párrafo: “¿De que se ríe el Presidente? ¿Por qué su seguridad y energía? ¿Qué es lo que está viendo él que los demás no alcanzan a ver?”.
Lleva el título AMLO, pensamiento y acción y responde a las preguntas:
“Es sencillo. Mientras la mayoría está absorta en la provocación, la polémica y la confrontación, el presidente sabe que va ganando paso a paso la contienda y su Cuarta Transformación continúa avanzando en la dirección que él se propuso. Mientras más grande es una transformación, mayores son las resistencias. Los cuatro grandes adversarios y oponentes a su proyecto de nación y a la Cuarta Transformación: el poder Político, el poder Económico, el poder Mediático y el poder Sindical han sido sacudidos y estructuralmente tocados por la 4T, que los está orillando a su vez a una profunda transformación...”.
Del político resalta que los partidos están en crisis, “sin proyecto, rumbo, brújula o candidatos de alto perfil”, que “han diluido su identidad y negociado su ideología”, por lo que “por sí solos, difícilmente podrían permanecer en el largo plazo”.
La 4T, dice, “busca dejar como legado una nueva clase política y una democracia fortalecida que sustente su viabilidad, no en la partidocracia sino en la democracia representativa” que sirva al pueblo y no se sirva “del presupuesto del pueblo”.
En lo económico, se describe a los empresarios como “usualmente cercanos al poder político”, pero “no solo han sido expulsados del espacio y los negocios a modo con el gobierno, sino que además hoy deben alinearse con las mejores prácticas internacionales de negocios, es decir, cero transas y corrupción” (pagar impuestos o cárcel, subir los sueldos, eliminar la facturación fraudulenta y el outsourcing, por ejemplo).
Sobre los medios afirma que éstos, “sus conductores, analistas, columnistas, intelectuales y académicos no solo han sido despojados de su mayor fuente de ingresos económicos sino que también han perdido el glamour y los privilegios del auto llamado Cuarto Poder y sus increíbles negocios”, que son “vapuleados en un debate circular mañanero para el cual no estaban preparados, siendo a nivel mundial gradualmente desplazados por las redes digitales”.
Ve a los gremios “petroleros, electricistas, burócratas, telefonistas, universitarios, ferrocarrileros, automotrices, maquiladoras y de la educación, a pesar algunos radicales en el CNTE” como “poderosos sindicatos” que “han sido neutralizados y hoy están siendo lanzados hacia el espacio desconocido de la democratización y la depuración de la vida sindical”.
El empeño de López Obrador, dice el escrito, es lograr que se geste “una nueva clase” política, económica, mediática y sindical…
Carlos Marín