La emisión de facturas electrónicas ha provocado un mayor número de casos de fraude y remarcación de vehículos robados; muchos se cometen utilizando documentación que fue compartida de buena fe por sus propietarios, a través de aplicaciones de mensajería como WhatsApp o por internet.
El presidente de la Red Nacional de Consejos Ciudadanos, Rafael Rueda Moncalián, alertó que han observado que se han incrementado las denuncias por el uso de documentos digitales para cometer delitos relacionados con el robo de automotores.
Consideró que uno de los factores es que la Secretaría de Hacienda, al emitir la factura digital, facilitó este tipo de conductas: “anteriormente tenías una factura original en papel; ahora tú tienes una electrónica, que puedes imprimir hasta cuatros veces”.
Explicó que muchas veces las personas quieren vender su vehículo y hay quienes se comprometen a comprarlo y les piden que manden copia de los papeles; los documentos se envían de buena fe (incluso captura de pantallas o fotos de facturas electrónicas de los automóviles) por WhatsApp.
Los delincuentes imprimen la factura y con esa “duplican los papeles de otro vehículo robado, porque remarcan los números de serie, o simple mente los falsifican “para mover” (revender) los que fueron hurtados.
Advirtió que lo que se tiene que hacer es evitar en todo momento tener las facturas electrónicas en los teléfonos celulares u otros dispositivos móviles, jamás enviarlos por vías digitales o en todo caso, antes marcar las imágenes con la leyenda “copia sin valor” a lo largo de todo el papel, o tachado para hacerlo inválido.
Otra modalidad delictiva que ha crecido es que venden el vehículo y el vendedor se queda con copias de la factura electrónica y siguen pagando el seguro, pero a los 15 o 20 días que te lo vendió lo reporta como robado, con la finalidad de que ese vehículo no se vuelva a localizar y cobran el seguro.
El comprador se da cuenta después si es que revisa el Registro público de vehículos, o por alguna alerta policíaca de que lo que compró ya tiene un reporte de robo previo.
“Eso es un fraude, pero en el inter de que demuestras la compra de buena fe ya te detuvieron, ya metieron ese vehículo al corralón y lo reclama la aseguradora. Se está dando mucho eso a nivel nacional, sobre todo por parte de gente que compra en la calle”, anotó.
Rueda Moncalián consideró que la mejor alternativa para evitar estos fraudes es comprar vehículos en establecimientos fijos, donde la gente pueda, en un momento dado, ir a reclamar.
Dijo que se deben evitar las transacciones riesgosas así como el mal uso de la documentación.