Tira la CNTE a su segundo presidenciable
Primero fue Aurelio Nuño, a quien la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación dejó noqueado, en la lona y fuera de la carrera presidencial, con la instalación de una mesa de diálogo a pesar de que el secretario de Educación había jurado y perjurado que “no habría dialogo” con la disidencia magisterial; y ahora es el secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, a quien la CNTE podría sacar también de la pelea por la sucesión, tras haber capitulado en temas como la reinstalación de maestros no evaluados, el pago a comisionados y la liberación de sus dirigentes.
De ese modo, sin levantar aún sus bloqueos, plantones y actos de sabotaje, a pesar de todo lo que ya les entregó el gobierno federal, la Coordinadora llevaría un récord de dos aspirantes presidenciales reventados, al mismo tiempo que estrecha sus lazos políticos con otro precandidato, Andrés Manuel López Obrador, lo que convierte a la organización disidente del magisterio ya no sólo en un grupo de presión y chantaje en materia educativa, sino también en una fuerza política real que está jugado y jugará un papel real en la sucesión presidencial de 2018.
Ante la posición irreductible de la disidencia magisterial y la renuncia del gobierno de Peña Nieto a aplicar la ley, tras el torpe operativo que terminó con 10 muertos en Nochixtlán, no había manera de que Osorio Chong saliera bien librado de las negociaciones que llegaron a su clímax en la Secretaría de Gobernación. El gobierno y sus representantes, el secretario Osorio y el subsecretario Miranda, llegaron arrodillados y amarrados de manos a ese diálogo donde quien llevó la voz cantante fue la CNTE, que se jactó de derrotar por segunda vez a la autoridad federal —la primera fue cuando en contra de Nuño les pusieron la mesa— y de doblegar al mismísimo titular de Gobernación, al que dejan desgastado y maltrecho en su aspiración presidencial.
Después de oír a los empresarios vociferar y demandar incluso al Poder Ejecutivo por “omisión en la aplicación de la ley”, y a organizaciones como Mexicanos Primero, que advirtieron que no aceptará “una negociación al margen de la ley”, está claro que la percepción que dejaron los acuerdos entre la Segob y la CNTE no deja lugar a dudas: una disidencia magisterial que impuso su voluntad y se consolidó como poder de facto y un gobierno federal debilitado, doblegado y superado.
NOTAS INDISCRETAS… Muy fuerte calaron en Insurgentes Norte los calificativos de “mentiroso” y “Pinocho” que le endilgó ayer el senador Miguel Barbosa al dirigente del PRI, Enrique Ochoa. Tan fuerte, que el CEN priísta emitió un comunicado para responder al líder de los senadores del PRD. “No es permisible que un senador de la República, representante de un partido político, desinforme a la población. Los senadores tienen que elevar el nivel de análisis, discusión y debate en beneficio de la población”, dijo de entrada el dirigente del partido tricolor. Según Ochoa, los aumentos a los combustiles y tarifas de luz anunciados por la Secretaría de Hacienda, no contradicen la afirmación de que las tarifas eléctricas para uso doméstico de bajo consumo, que se aplica a 90% de la población, no han aumentado y sí bajaron un 2% con respecto a diciembre de 2015. Los aumentos a tarifas eléctricas de uso industrial, dijo, están relacionados con el alza de combustibles a nivel internacional. “El senador Barbosa hace calificativos a mi persona con absoluto desconocimiento, faltando a la verdad y tratando de engañar a quien lo escucha”, remató Ochoa. Nomás le faltó gritar al dirigente priísta: “¡Soy un niño de verdad!”... Mientras crece la exigencia social al gobierno para que ajuste su gasto e indicadores como el aumento de la deuda pública alcanzan ya el 47.6% del PIB, es un hecho que los recortes presupuestales no llegan a todas las instituciones públicas, al menos no al Instituto Nacional Electoral, donde no entienden el concepto de austeridad. Además del anuncio de que buscan estrenar en 2020 nueva sede con costo de mil 100 millones de pesos, hace unos días EL UNIVERSAL reveló que el INE gasta 230 millones de pesos anuales en arrendar autos, cuando le costaría mucho menos comprarlos. A eso se suman los sueldos excesivos de consejeros y funcionarios del instituto, lo que en conjunto genera a la sociedad la percepción de que el órgano encargado de velar por nuestra democracia no sólo nos sigue costando demasiado a los mexicanos, sino que escudados en su autonomía, en el INE no muestran voluntad alguna para disminuir sus excesos presupuestales… Se baten los dados. Serpiente y caída libre.