César Raúl Ojeda, Adán Augusto y Morena al 24
La llegada de César Raúl Ojeda al estado como nuevo delegado en funciones de presidente del Partido Movimiento de Regeneración Nacional, causó sorpresa y expectación entre la militancia y delegados de este instituto político, al trascender que su designación fue “amarrada” no de Morena sino desde la Secretaría de Gobernación, cuyo titular es el presidenciable Adán Augusto López, por lo que no hubo injerencia del Comité Ejecutivo Nacional. Lo único cierto, es que con su presencia se inicia el proceso interno con miras a la elección constitucional de la elección del 2024 en Morelos y el país.
LOS PRESIDENTES DE MORENA EN MORELOS.- César Raúl Ojeda Zubieta, paisano y hombre de todas las confianzas del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, después de haber sido integrante del Partido de la Revolución Democrática y del Partido Revolucionario Institucional (PRI), se convirtió en candidato del PRD a gobernador de Tabasco hasta en tres ocasiones y ahora, con tan sólo nueve meses de haberse afiliado al partido que fundó AMLO, se ha convertido en el mandamás de los morenistas en la tierra de mi general Emiliano Zapata.
El ahora líder de Morena en Morelos se afilió apenas en febrero de este año y como regalo de Navidad y fin de año le obsequiaron la dirigencia de Morena en Morelos, quizá derivado del desastroso trabajo político que sus dirigentes que han pasado por este instituto le han quedado a deber al no dar la talla para colocar al partido como un ente de verdadera fuerza entre la sociedad. Algo que ha quedado evidenciado con las derrotas electorales en la pasada elección de junio del presente año.
Morelos, en las últimas dos décadas ha demostrado con los triunfos obtenidos por AMLO que es obradorista, algo muy distinto a ser morenista y más con sus dirigentes que han encabezado a este ente partidista.
Cabe recordar que el primer dirigente que tuvo Morena fue Quintín Barrera Miranda, quien durante su gestión incurrió en graves y severos problemas por su inexperiencia y falta de talento. Por ejemplo, entre otras cosas provocó que multaran al partido por más del millón 200 mil pesos afectando de manera severa las finanzas de Morena por parte del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), luego de que incurrió en malos manejos financieros cuando fue presidente del CDE en los años del 2015 al 2017.
Y es que en el año 2018, Morena recibió seis millones 871mil 839 pesos por concepto de prerrogativas además de 206 mil 155 pesos para actividades específicas, aunado a los tres millones 435 mil 919 qué se le otorgó por parte del órgano electoral tan sólo porque fue un año electoral. Empero, derivado de las irregularidades de los procesos intermedios constitucionales electorales del 2015 se presentaron inconformidades y acusaciones porque hace tres años (2018) Morena no le otorgó recursos a la campaña del entonces candidato a gobernador Cuauhtémoc Blanco, ni tampoco a quienes los representaron para buscar una curul en el Congreso local y federal, así como en los ayuntamientos.
Sobre las sanciones administrativas y financieras qué les aplicaron fue derivado del ejercicio fiscal 2015, en el que se observaron irregularidades en los informes anuales de ingresos y gastos del ejercicio de esa elección intermedia.
LAS MULTAS MILLONARIAS A MORENA.- Justamente en este mes de noviembre pero de hace tres años Miguel Lucia Espejo en asamblea fue electo como nuevo dirigente estatal en sustitución del tristemente célebre Quintín Barrera Miranda.
Miguel Lucía Espejo llegó a Morena como su dirigente y en su periodo, un tema trascendental fue la expulsión de Manuel Nava Amores pese a que fue el primer y único diputado local en el Congreso durante la legislatura 52, porque se le acusó de incurrir en actos de corrupción, supuestamente por recibir dinero a cambio de aprobar todas las solicitudes de crédito en favor del gobierno de Graco Ramírez Garrido Abreu, cuando la dirigencia morenista lo había rechazado.
Finalmente, Miguel Lucía Espejo renunció a la dirigencia de Morena el 29 de enero del 2018 para asumir la representación de senador propietario tras la salida de Rabindranath Salazar Solorio, quien solicitó licencia para irse a la campaña presidencial de AMLO. En su lugar quedó Gerardo Albarrán Cruz, secretario general en funciones de presidente hasta el pasado viernes 19 cuando asumió el cargo el tabasqueño César Raúl Ojeda Zubieta.
Los tiempos negros de la dirigencia de Morena tal parece han terminado porque Albarrán Cruz se movió por los vientos que mejor le acomodaron tratando de no ensuciarse ni mucho menos conflictuarse sin importarle la problemática del estado que se ha evidenciado en los últimos años, como sucede con la grave crisis de inseguridad o la desfachatez y cinismo en el que cayeron varios alcaldes morenistas como el de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán y con quién siempre fue su cómplice.
Hoy, con la llegada de César Raúl Ojeda Zubieta tal parece se empieza a hacer justicia y buscan prepararle el camino a Rabindranath Salazar, Subsecretario de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación, luego de su “sacrificio al hacerse aún lado en la candidatura a la gubernatura de Morelos en el 2018. La presencia del oriundo de Tabasco y amigo de Andrés Manuel López Obrador y quien destapó a Adán Augusto López como un presidenciable para el 2024. Basta recordar que desde la Secretaría de gobernación federal cuyo titular es Adán Augusto López, fueron designados 27 delegados de Morena en el país.
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