Incognitapro

La indignación por el respaldo a Putin de un grupo de diputados mexicanos llega al despacho de Blinken

El representante demócrata Vicente González impulsa una petición para retirar las visas a 25 legisladores de Morena, el Partido del Trabajo y del PRI

El embajador ruso en México, Víktor Koronelli, sentado a la izquierda, posa con diputados de Morena, PT y el PRI, el pasado 23 de marzo.

Los ecos de las simpatías prorrusas manifestadas en el Congreso mexicano han llegado a Estados Unidos, donde un representante del Partido Demócrata envió el lunes una carta al secretario de Estado, Antony Blinken, y al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, solicitando que la Administración de Joe Biden retire la visa a 25 legisladores del país vecino. El congresista texano Vicente González plantea que los servidores públicos extranjeros que muestren su apoyo a Vladímir Putin en medio de la invasión de Ucrania pierdan el derecho a ingresar en territorio estadounidense. La medida -propuesta como una advertencia, “un mensaje al mundo”- ha llegado al despacho de los dos secretarios dos semanas después de que diputados oficialistas de Morena y del Partido del Trabajo (PT), pero también del Partido Revolucionario Institucional (PRI), hoy en la oposición, crearan un grupo de Amistad con Rusia.

“En los últimos días, y en medio de una crisis internacional perpetrada por Rusia en Europa del Este, varios legisladores del Congreso Federal de México aprovecharon esta oportunidad para alejarse del mundo libre y apoyar al presidente ruso, Vladímir Putin”, se lee en el escrito de González. El representante recuerda que “mientras el presidente, Andrés Manuel López Obrador, sigue manteniendo públicamente una postura neutral en el conflicto entre Rusia y Ucrania”, miembros de su movimiento, Morena, y otras fuerzas sí han tomado partido en el conflicto.

Está por ver que Blinken y Mayorkas, que en marzo viajó a México y se reunió con el propio López Obrador y altos funcionarios del Ejecutivo federal, tomen en consideración la petición del congresista. Pero sí refleja un clima de indignación que ha manifestado en México la inmensa mayoría de la oposición y ha generado también cierta incomodidad en algunos sectores oficialistas. “Ya es lo suficientemente vergonzoso que México -nuestro vecino más cercano del sur- haya optado por no unirse a la comunidad internacional de democracias [ante la agresión del Kremlin]. En cambio, se han negado a enviar ayuda a Ucrania o imponer sanciones a Rusia”, prosigue González en su carta en referencia al respaldo militar.

Esa posición es la habitual del Gobierno mexicano ante cualquier crisis internacional. Sin embargo, lo que se vio en la Cámara de Diputados fue especialmente polémico porque en el mismo acto los legisladores permitieron también que el embajador de Rusia, Víktor Koronelli, difundiera propaganda rusa sobre la agresión a Ucrania en la sede de la soberanía popular. El congresista estadunidense considera que algunos de los promotores de esa sesión no pueden compatibilizar su cercanía a Rusia con “el privilegio de ingresar, viajar o invertir en Estados Unidos”.

Los diputados mencionados por la carta para que la Administración de Biden revise sus visas son, en su mayoría, del Partido del Trabajo, la bancada que impulsó la creación del grupo de amistad. El PT, uno de los satélites de la llamada Cuarta Transformación, el proyecto de López Obrador, se autodefine en sus estatutos como formación “antiimperialista” que “lucha por una sociedad autogestionaria, justa y socialista”. Entre ellos figura Alberto Anaya, dirigente nacional del partido, y también Gerardo Fernández Noroña, veterano político que perteneció al grupo fundador del PRD. También hay legisladores de Morena como Armando Contreras Castillo y Miriam Citlally Pérez Mackintosh.

Pero al acto se sumaron incluso dirigentes del PRI, el partido que gobernó México de forma ininterrumpida durante siete décadas. Augusto Gómez Villanueva, de 92 años, rememoró su infancia y dijo que de pequeño aprendió La Internacional, un himno francés del siglo XIX que en su origen nada tuvo que ver con la Unión Soviética y del que Stalin se apropió hasta los años cuarenta.

Ámbito: 
Nacional
Tema/Categoría: