A partir del próximo lunes 18 de abril el ayuntamiento de Cuautla prescindirá de los servicios de 200 empleados municipales de confianza y sindicalizados, anunció el presidente Rodrigo Arredondo López.
A partir del próximo lunes 18 de abril el ayuntamiento de Cuautla prescindirá de los servicios de 200 empleados municipales de confianza y sindicalizados, anunció el presidente Rodrigo Arredondo López. Luego de rendir un informe por sus 100 días de gobierno, el edil manifestó que se tiene que adelgazar la nómina que actualmente significa un gasto de 300 millones de pesos al año.
Reveló que el municipio tiene un promedio de poco más de 500 millones de pesos de presupuesto y pagar una nómina de 300 millones, más los adeudos que se tienen, no les queda prácticamente nada para la realización de obras de beneficio social. Observó que la población lo que quiere son obras y que se presten los servicios públicos de manera eficiente, además de que se compren vehículos para solucionar los problemas que hoy se enfrentan.
Dijo que le dejaron un ayuntamiento con serios problemas económicos, además de equipo en malas condiciones, por lo que se necesita tener lo necesario para poder cumplir los compromisos que se hicieron con la población. De ahí, abundó la necesidad de que se tenga que adelgazar la nómina con el despido del personal que se tiene de más, sea de confianza o sindicalizados a los que hay que finiquitar.
Añadió que el finiquito de estos 200 empleados le significará al ayuntamiento un gasto de 12 millones de pesos, dinero que sí cuenta la administración para indemnizar conforme a la ley a estos servidores públicos.
Mencionó que mantener a esos 200 trabajadores durante un año, le significa al ayuntamiento un gasto de 15 millones de pesos, por lo que aun indemnizándolos este año el ayuntamiento obtendría un ahorro de tres millones de pesos y en los siguientes dos años una reserva total de 30 millones. Remató que el dinero que se ahorrará será invertido en obras y servicios públicos municipales.
Arredondo López puntualizó que platicaran con los trabajadores para que se les pueda liquidar conforme a la ley, de manera que se pueda llegar a buenos acuerdos que beneficien a ambas partes.