TARDE o temprano tenía que suceder: así como lo ha hecho con todos sus aliados y colaboradores, incluido el propio Mike Pence, Donald Trump terminó exhibiendo el trato grosero, déspota y hasta denigrante que le dio a Andrés Manuel López Obrador.
YA SE SABE que, de todo lo que dice Trump, una mitad no hay que creerla y la otra mitad hay que ponerla en duda. Pero el alarde que hizo en Ohio de cómo presionó al gobierno mexicano y lo obligó a cerrarle el paso a los migrantes, no tiene nada de fantasía.
SIEMPRE se dijo que el autoproclamado gobierno "más humanista" de México había aceptado el triste papel de guardia fronteriza de Estados Unidos, ¡desde Chiapas! Esto quedó comprobado con el despliegue de más de 20 mil efectivos de la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina, para contener la oleada migratoria entre 2019 y 2021.
RESULTA difícil, pero verosímil, escuchar el relato de Trump sobre un López Obrador incrédulo primero y después sumiso a las órdenes del norteamericano. Si la política es el arte de tragar sapos, a AMLO le tocó comérselos binacionales.
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POR CIERTO, habría que preguntarle a Claudia Sheinbaum, Citlalli Hernández y Mario Delgado si siguen tan interesados en denunciar a los traidores a la patria. Porque el artículo 123 del Código Penal Federal clarito dice que comete este delito quien realice actos contra la soberanía de la nación "con la finalidad de someterla a persona, grupo o gobierno extranjero". Y, pues, Donald Trump anda diciendo justamente eso de ya saben quién. ¿O mejor de eso no hablamos?
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SI ALGUIEN sabe dónde se metió Nadine Gasman, por favor avísenle que en México están matando mujeres todos los días. Mientras en todo el país crecen la indignación y las protestas por casos como el de Debanhi Escobar, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres está más interesada en la grilla.
CON ESO de que el gobierno de la 4T la propuso para dirigir la Organización Panamericana de la Salud, Gasman ha decidido guardar un muy cómodo silencio mientras en las calles y en las plazas se escuchan los reclamos por los feminicidios, las desapariciones y la violencia generalizada contra las mujeres.
Y SI la funcionaria no ha dicho ni pío, menos lo han hecho los secretarios de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez; y de Gobernación, Adán Augusto López, que comparten la idea de AMLO de que si no abordan un tema y lo ignoran... ¡no existe!
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CON ESO de que Arturo Zaldívar anda en campaña, perdón, anda tan comunicativo en estos días, tal vez podría aclarar de una vez por todas si es cierto que quiere ocupar el lugar de Alejandro Gertz Manero al frente de la FGR. Mañana participará en la primera reunión preparatoria de la Cumbre Judicial Iberoamericana, un escenario ideal para que deje de andarle jugando al tapado... ¡o se destape!
