Morena y aliados detuvieron los exhortos para transparentar el uso de 2 mil millones de pesos destinados al mantenimiento de la infraestructura en hospitales, clínicas y centros de salud
El bloque de diputados formado por Morena y sus aliados en el Congreso del Estado frenó la aprobación de tres puntos de acuerdo para que tanto el secretario de Salud, Marco Antonio Cantú, como el director de los Servicios de Salud Morelos, Héctor Barón Olivares, rindan cuentas sobre el uso del presupuesto de 2 mil millones de pesos en el sector, pese al cual las instalaciones de hospitales, clínicas y centros de salud en el estado muestran deficiencias enormes que afectan la atención al público.
Los legisladores agrupados en el denominado G8 de los partidos Morena, del Trabajo, Redes Sociales Progresistas y Encuentro Social, detuvieron los exhortos del Congreso. El primero va dirigido al gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, para que informe cómo se ejercieron más de 2 mil millones de pesos destinados al mantenimiento de las unidades médicas del estado y explique “la falta de compromiso con el derecho humano de la salud, dado que no se han implementado acciones que atiendan las necesidades materiales y humanas de los morelenses, a pesar que entre sus atribuciones cuenta con la facultad de la libre transferencia para destinar los recursos presupuestales necesarios”.
El segundo a la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF) del estado de Morelos, para realizar una auditoría especial al gobierno del estado y conocer de manera transparente cómo se aplicó y en qué se destinaron los recursos, llamado que incluye el llamado a comparecer a Héctor Barón Olivares, director de los Servicios de Salud, para explicar ante las y los legisladores sobre el cumplimiento a las normas mexicanas en temas de infraestructura y mantenimiento preventivo de los hospitales.
Mientras que el tercero iba a la Auditoría Superior de la Federación, “para que realice una auditoría minuciosa y así conocer si los recursos asignados a Morelos en dicha materia desde el gobierno de la República fueron gastados en estricto apego a la legalidad”.
Pese a los pronunciamientos a favor de los legisladores de los once legisladores de los partidos Acción Nacional, Movimiento Ciudadano, Revolucionario Institucional, Nueva Alianza y Morelos Progresa, los exhortos no alcanzaron los votos necesarios para ser aprobados, por lo que se regresaron a la “congeladora legislativa”.
La promovente de los exhortos fue la presidenta de la Comisión de Salud del Congreso, la diputada Andrea Gordillo, quien lamentó que en el Congreso local persistan “prácticas de la vieja forma de hacer política, pero les tengo una buena noticia, la nueva forma de hacer política ya llegó y viene pisando fuerte y no nos vamos a callar”, afirmó frente a los diputados, y al bloque que rechazó los exhortos advirtió “que no se les haga costumbre, porque los ciudadanos son inteligentes, ya no les creerán sus dobles discursos. La fiscalización, la rendición de cuentas y la transparencia, deben demostrarse con acciones”. Gordillo Vega remató: “independientemente de esta votación, sabemos que existen mecanismos ordinarios de rendición de cuentas y haremos uso de estos mecanismos legales”.
Los exhortos fueron presentados al plano luego de que en medios de comunicación se denunciaran las deficiencias de la infraestructura en salud en el estado de Morelos, a cuyo mantenimiento de destinan, de acuerdo con los diputados, más de dos mil millones de pesos. Frente al escándalo que suscitaron las denuncias en medios de comunicación, el gobierno del estado ofreció una rueda de prensa en la que se aseguró que los recursos para mantenimiento de la infraestructura hospitalaria eran insuficientes, por lo que los diputados de oposición hicieron la invitación a la comparecencia de los funcionarios de salud para aclarar en qué se habrían utilizado los recursos, y se añadieron los exhortos al gobernador y a las instancias fiscalizadoras locales y federal.