El Presidente y sus candidatos de enfrente
Estos inventan lo ya inventado, lo que les facilita la tarea.
Florestán
Andrés Manuel López Obrador, desde su vena priista que niega, pero no supera, gestiona su sucesión desde julio del año pasado tras la derrota en las intermedias, cuando perdió la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y en la Ciudad de México, su santuario, nueve de las 16 alcaldías, lo que le llevó en un control de daños a adelantar la sucesión presidencial, para lo que destapó a los que llamó sus corcholatas: Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, y poco a poco al recién llegado, en agosto, a la Secretaría de Gobernación, su hermano, éste sí de verdad, Adán Augusto López Hernández, y dejó la baraja con esas tres cartas.
Así se llevó todo un año hasta que el miércoles, y a insistencia de algunos de sus monigotes en la mañanera, agregó, finalmente, a Ricardo Monreal y a Loroña, dijo.
En este ejercicio de poder llegó a un extremo que nunca se había visto: destapar a los presidenciables de la oposición, ante la incapacidad de ésta para nominarlos.
Y así, en la mañanera, leyó una lista de todos los que quiso en un afán de distraer la atención de lo grave, crisis económica, educativa, de seguridad y sanitaria; las filtraciones de Guacamaya y El Rey del Cash, y a la vez buscar la confrontación de sus nominados en la oposición.
Esos son sus recursos cuando ve que se le descompone su proyecto y para lo que busca descomponer el de enfrente con una falsa relación de precandidatos, cuando el problema no es de hombres, es de organización y proyecto.
El prestidigitador sigue operando.
RETALES
1. RUPTURA. La señal de ruptura entre la 4T y Tatiana Clouthier, que adelanta el tono de las negociaciones dentro del T-MEC, es el que Raquel Buenrostro haya cesado a la subsecretaria de Comercio Exterior, Luz María de la Mora, negociadora del T-MEC. El plazo venció el pasado día 3 y sigue que uno de los dos países pida el panel, tribunal, para decidir el monto de las sanciones arancelarias a México;
2. ÁNGEL. José Ángel Gurría, secretario de la OCDE quince años, ha sido desde hace mucho el mejor candidato presidencial, siempre detenido por el priismo desde tiempos de Ernesto Zedillo, quien le cerró el camino al gobierno del entonces Distrito Federal, en 1997, de donde hubiera saltado a Los Pinos. Hoy, 25 años después, se le abre la puerta a la Presidencia, pero pide una alianza total, suma de Gurría y coalición que sería la única competitiva en la presidencial de 2024;
3. GIRA. Tras ser aprobada por la operación Adán Augusto la reforma constitucional que amplía hasta 2028 la gestión de las fuerzas armadas en materia de seguridad pública, el mismo secretario de Gobernación realizará un recorrido por los 32 congresos locales, que le dará una exposición política que ningún aspirante ha tenido. Y aún hay quienes le dudan.
Nos vemos el martes, pero en privado
Joaquín López-Dóriga
@lopezdoriga
lopezdoriga.com