Un grupo de aproximadamente 12 personas encapuchadas entró a las oficinas de la entrada principal de Ciudad Universitaria, en la Ciudad de México. Estas personas provocaron daños a inmuebles, detonaron explosivos y prendieron fuego al mobiliario, así como en la vía pública.
A través de un boletín, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó que este grupo de personas también sustrajo equipos de cómputo, radios transmisores, fotocopiadoras, aparatos médicos, mobiliario y pertenencias del personal administrativo.
Según el comunicado, los objetos robados fueron trasladados al interior del auditorio “Justo Sierra”, de la Facultad de Filosofía y Letras. Este lugar es conocido como el auditorio Che Guevara, nombre con el que fue rebautizado por el grupo de personas que tomó el espacio.
En este contexto, la UNAM condenó los hechos vandálicos, el daño al patrimonio universitario y el robo de objetos al personal universitario. Dijeron que una protesta no puede ser justificación para realizar actos propios de organizaciones criminales “que en el fondo pretenden desestabilizar a la Universidad”.
En consecuencia, el departamento jurídico de la Universidad acudió a la Fiscalía de Investigación Territorial, en la alcaldía de Coyoacán, para realizar la denuncia correspondiente.
En este sentido, se inició la carpeta de investigación por el delito de daño a la propiedad y robo.
El comunicado también informa que la Universidad proporcionará todos los elementos de prueba que tiene en su poder para dar con las personas responsables.
El auditorio Che Guevara
El auditorio Justo Sierra de la Facultad de Filosofía y Letras en Ciudad Universitaria de la UNAM fue tomado en el año 2000 por diversos grupos anarquistas. Posteriormente fue renombrado como auditorio Ernesto “Che” Guevara, más popularmente conocido simplemente como “el Che”.
En 2001 se abrió un comedor popular para los estudiantes y maestros universitarios en “el Che”. Si bien en un inicio se ofrecían alimentos con carne, posteriormente pasó a venderse únicamente comida vegetariana.
Con el paso de los años diversos grupos universitarios han exigido la recuperación del espacio. De hecho, algunos profesores y estudiantes han denunciado que los ocupantes del espacio impiden la entrada de personas ajenas e incluso hay quienes han recibido amenazas por parte del grupo.