EL REGIONAL: Primer trienio de Graco, con la peor corrupción en México

Al concluir 2015, el primer trienio de la administración estatal de Morelos, encabezada por Graco Ramírez Garrido Abreu, nuestra entidad alcanzó el mayor crecimiento en actos de soborno en el país, frente a todas las demás.

Así lo acaba de demostrar el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), tras dar a conocer la semana pasada estadísticas por el Día Internacional Contra la Corrupción, que se celebró el 9 de diciembre.

En sus cifras, que comparan la situación de personas víctimas de soborno en cada una de las entidades federativas mexicanas, entre 2013 y 2021, queda perfectamente establecido que, apenas llegó el perredista al gobierno morelense, el estado donde la corrupción aumentó más y de forma desproporcionada fue Morelos, hasta convertirse en el primero en ese rubro en la nación.

Los datos de Inegi muestran que las personas que sufrieron peticiones de "mordida" al hacer trámites públicos o requerir servicios en Morelos, en 2013, ocuparon el 7.7 por ciento del total. Eso colocaba a la entidad en el lugar número 24 nacional en la penosa lista.

No huelga recordar que Graco Ramírez asumió la gubernatura tlahuica el último mes de diciembre de 2012. Tres años después, en 2015, cuando concluía la mitad de su gestión, las víctimas de exigencia de soborno en el ámbito referido en este estado representaron, prácticamente, 3 veces más que dos anualidades previas, al alcanzar 20.1 por ciento. Con ello, este territorio se convirtió en el líder nacional en ese fenómeno delincuencial, donde las autoridades juegan fundamental rol.

Es importante destacar que esos números involucran a las personas mayores de 18 años que debieron realizar trámites en oficinas públicas o solicitar ahí servicios, según la fuente de donde proviene la información.

Es destacable que, como puede verse en la tabla del instituto estadístico que acompaña este texto, en ninguna otra entidad, la elevación de los casos de soborno alcanzó, en ese lapso, una proporción tan grande como la que sufrieron los morelenses en el primer trienio de la administración que encabezó el tabasqueño que hoy no tiene partido (el de la Revolución democrática desapareció en Morelos tras su gestión).

Un lastre

Esa herencia de sobornos y corrupción, que creció como nunca con el gobierno de Graco Ramírez, mantiene a Morelos con un problema en dicho fenómeno hasta la fecha, aunque ya no de forma tan grave como en 2015.

Al analizar las cifras del instituto de medición, que las ofrece para los años 2013, 2015, 2017, 2019 y 2021, se evidencia que ese delito de soborno, que han padecido los morelenses, fue disminuyendo muy lentamente, conforme se extinguía y quedaba para la historia el gobierno de Ramírez Garrido Abreu.

En el mismo orden de los años presentados después de 2015, las víctimas de exigencia de soborno aquí representaron, porcentualmente, 17.2 (2017), 16.4 (2019) y 15.5 (el año pasado).

Con esa última cifra de 2021, Morelos quedó en el lugar número 12 de la república, en cuanto al lastre de la corrupción con cara de sobornos, 11 puestos más abajo a nivel nacional, del que ocupó en el primer año completo de la administración de aquel exgobernador.