I.   Renovación. Lo primero que hizo al llegar a Baja California Sur Enrique Ochoa Reza, presidente nacional del PRI, fue lograr acuerdos. Al aeropuerto arribaron a recogerlo, aunque cada quien por su lado, los senadores Ricardo Barroso e Isaías González, pero el líder de inmediato los unió. No sólo la militancia en la región conoce de sobra las diferencias entre ambos legisladores, sino también Ochoa Reza. Así que los invitó a subir al vehículo que conduce en sus giras. Horas después anunció que en 30 días el PRI iniciará la renovación de toda su estructura partidista en el estado y llamó a dejar atrás las desavenencias y cerrar filas para recuperar el gobierno, hoy en manos del PAN. Más que bien.

II. Hábil reajuste. Eruviel Ávila, gobernador del Estado de México, envió al Congreso estatal una iniciativa para hacer reformas en materia anticorrupción entre las que se incluyen la ley 3de3, además de que planifica dar más facultades a los pobladores para denunciar y ejecutar recursos, y a las autoridades para sancionar a los funcionarios. Ávila explicó que cuando se apruebe la ley 3de3, todos los servidores públicos del Estado de México y los gobiernos municipales estarán obligados a presentar la declaración patrimonial, la de interés y la declaración fiscal en términos que lo fije la ley correspondiente. Nunca es tarde. Aunque la guerra anticorrupción vaya perdida muchos años.

III. Celebración. Ricardo Anaya Cortés, el líder nacional del PAN, cumple hoy un año al frente del partido. A sus 37 años de edad, el queretano logró en este lapso el mayor número de gubernaturas para el instituto político. Las victorias del PAN, solo y en alianza con el PRD, superan a las conseguidas por sus predecesores Gustavo Madero, en cinco años, y Germán Martínez y César Nava, los dos exdirigentes afines al expresidente Felipe Calderón, en tres. A finales de 2016, el PAN gobernará a 40 millones de ciudadanos en once estados. Anaya, quien se ha sabido rodear de importantes figuras del partido, tiene mucho por celebrar. Que lo vean como presidenciable, por ejemplo.

IV. ¿Negociación? Sobre el secuestro de Alfredo Guzmán, el hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, líder del Cártel del Pacífico, se especuló que su plagio se trataba únicamente de un método de negociación entre cárteles. Todo indica que así fue. Ayer trascendió que El Alfredillo está vivo. Diversos reportes, entre ellos uno de la agencia AFP, apuntaban a que fue liberado junto con sus cinco acompañantes, aunque al cierre de esta edición ninguna autoridad ha confirmado la noticia. Guzmán, de 29 años, fue privado de la libertad en la madrugada del lunes en Puerto Vallarta, Jalisco. Si se confirma dicha versión en las próximas horas, ¿se acabará la angustia? No por el destino del encargado del trasiego de drogas, sino por la violencia que esperaban en Sinaloa tras el levantón del junior. Al tiempo.