La inflación de 2022 obligó a la Secretaría de Hacienda a realizar ajustes en el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicio (IEPS).
Apartir del 1 de enero de 2023, los ciudadanos pagarán más impuesto por consumo de cigarros, refrescos y gasolinas, con base en la actualización de las cuotas del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), según el acuerdo que la Secretaría de Hacienda publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La actualización del importe que causa el IEPS en los productos señalados fue del orden de 7.35% y está relacionada con la inflación acumulada en 2022, de 7.9%.
Con base en lo anterior, a partir del 1 de enero de 2023 los consumidores de tabaco pagarán una cuota de 0.59 por cigarrillo, contra la cuota de 0.54 vigente en 2022.
Y aunque a lo largo de 2022, la Secretaría de Hacienda autorizó diversos programas de subsidio para las gasolinas, la inflación del presente año provocó que los impuestos tengan un reajuste para el 2023 sacudiendo la economía de las familias mexicanas.
Apartir del 1 de enero de 2023, los ciudadanos pagarán más impuesto por consumo de cigarros, refrescos y gasolinas, con base en la actualización de las cuotas del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), según el acuerdo que la Secretaría de Hacienda publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La actualización del importe que causa el IEPS en los productos señalados fue del orden de 7.35% y está relacionada con la inflación acumulada en 2022, de 7.9%, en términos de lo que establece el artículo 17-A del Código Fiscal de la Federación, el cual, a partir de 2021, estableció los indicadores sobre los que debe hacerse la actualización del IEPS.
Con base en lo anterior, a partir del 1 de enero de 2023 los consumidores de tabaco pagarán una cuota de 0.59 por cigarrillo, contra la cuota de 0.54 vigente en 2022.
En materia de consumo de energéticos para vehículos automotrices, a lo largo de 2022, la Secretaría de Hacienda autorizó diversos programas de subsidio del IEPS que tuvieron como finalidad contener la inflación que el aumento de las gasolinas, por las condiciones del mercado internacional, provoca en el precio de los alimentos, aun así, la inflación acumulada de este año es la mayor registrada en los últimos años, según el Índice Nacional de Precios al Consumidor (ÍNPC) del INEGI, que la ubicó en 7.77% en la primera quincena de diciembre.