Justicia a los Deportistas
Morelos, entidad territorialmente pequeña junto a Tlaxcala, ha tenido un sitio importante en la historia. El sábado mismo, un oriundo que aquí nadie sabía de sus alcances, cuautlense, el muchacho Hernández Uscanga ganó la medalla de bronce en la complicada disciplina de Pentatlón Moderno.
Así, a vuelapluma, brotan los nombres, disculpándonos por algún(a)s omisiones:
El primero fue don Eduardo Garduño, futbolista en Londres 1948. No sabemos si en el lapso de ese 48 hasta la Olimpiada de México en 1968, 20 años después, hubo más jugadores en estas justas, pero esa ocasión participaron morelenses como Carolina Mendoza, de Zacatepec, en el volibol, igual un matrimonio honorable y destacado como el finado César Barrón y Gloria Inzúa. Con ellos, en el basquetbol femenil, una de las mejores jugadoras en la historia del país, María Rebollo Aguirre, oriunda del centro de Cuernavaca, a quienes con cariño conocemos todos como “La Galleta”.
Cuatro años después, el zacatepense José Angel Talavera fue figura en la hasta entonces mejor selección olímpica de futbol en Munich 72. En la siguiente edición, otro cuernavacense, Carlos “El Poro” García ganó con Hugo Sánchez y esa gran camada el Torneo Esperanzas de Toulon y compitieron en la Olimpiada de Montreal 76.
Puede el columnista equivocarse, pero es hasta la Olimpiada de Barcelona 92 donde regresa otro morelense, el boxeador de Altavista, Narciso González, ranqueado durante años como uno de los cinco mejores en la división mosca y que fue afectado por un fallo discutido en la arena. Su hijo, Bryan González estuvo a un paso de estar en Río de Janeiro, pero por el desorden que impera en la Federación, Conade y COM, fue enviado a Argentina apenas con su pasaje y sin equipo de apoyo. Bryan ganó consecutivamente tres ocasiones a Lindulfo Delgado, el peso ligero que representó a nuestro país en Río de Janeiro, cayendo en su primera pelea ante un italiano.
Aparecen otros deportistas como Lorenza Morfin, ciclista reconocida, y esta camada que representó al país en esta olimpiada brasileña, de Jojutla, de Cuernavaca, el cuautlense medallista (el único que lo ha logrado en la historia y tienen razón los que afirman que no faltan ya los que se auto nombran como sus mecenas sin serlo) que sólo él, su tenacidad y esfuerzo lograron la proeza.
A los mencionados habría que añadir futbolistas que han representado dignamente al país en Campeonatos Mundiales.