Fiscales generales de 21 estados solicitaron al Gobierno del presidente Joe Biden declarar a los carteles mexicanos de la droga como “organizaciones extranjeras terroristas”.
En total 21 fiscales generales enviaron una carta al presidente Joe Biden y al secretario de Estado, Antony Blinken, con la petición.
Subrayan que las sobredosis de drogas mataron a más de 100 mil estadounidenses en el último año, citando a la administradora de la DEA, Anne Milgram, quien llamó al fentanilo “la droga más mortífera que jamás ha enfrentado nuestro país”, pues causa 196 muertes al día.
También mencionan a los cárteles Sinaloa y Jalisco Nueva Generación como precursores del trasiego de droga y explicaron que se importan de China para después trasladarla a Estados Unidos.
Durante años, grupos estadounidenses han tratado de clasificar a los llamados carteles mexicanos como terroristas, lo cual ha sido rechazado por México, ya que esto podría dar pie a intervenciones militares directas en territorio nacional, tal como ocurre en países de medio oriente.
Por ejemplo, el expresidente Trump ha dicho que en caso de regresar al poder, ordenaría el lanzamiento de misiles desde los Estados Unidos hacia México para destruir los llamados narcolaboratorios.
Una intervención militar también podría representar un riesgo para los recursos naturales del país, por ejemplo, el petróleo o minerales estratégicos, justo como ha pasado en países como Afganistán e Irak.
Gobierno mexicano es inhábil para afrontar carteles, dicen
El promotor de la iniciativa, el fiscal Jason S. Miyares, del estado de Virginia, argumentó que “la inhabilidad del gobierno mexicano” de controlar a estos grupos “es una amenaza a nuestra seguridad nacional”.
“La existencia de tales fuerzas al otro lado de nuestra frontera terrestre del suroeste y la incapacidad del Gobierno mexicano para controlarlas representan una amenaza para nuestra seguridad nacional mucho mayor que una empresa típica de narcotráfico”, escribieron los procuradores.
También señalan que los cárteles asesinan a sus rivales, a funcionarios mexicanos y a estadounidenses en la frontera cuando llevan a cabo su “insurgencia armada”.
Y sentencian diciendo que la situación “no acabará hasta que escalemos nuestra respuesta”.
“Los cárteles mexicanos conducen una diaria guerra química contra los estadounidenses”, asevera el documento.
En la carta a Biden se afirma que la amenaza “es aún más grande por los conocidos nexos entre los cárteles mexicanos y las organizaciones como Hezbolá”.
Designar como “organizaciones terroristas extranjeras” a los cárteles mexicanos “dará a las fuerzas de seguridad estatales y federales mayores poderes para congelar los recursos” de estas organizaciones “y permitirá a fiscales imponer penas mayores” a quienes colaboren con ellas.
Además, que las leyes que existen en el país para combatir a los cárteles son insuficientes pues se enfocan en rastrear y penalizar sus actividades económicas, cuando muchos cuentan con la tapadera de negocios aparentemente legítimos como “el comercio de aguacate, gasoductos, minas de oro y hasta supermercados”.
Firmaron la carta los fiscales generales de los estados de Alabama, Alaska, Arkansas, Carolina del Norte, Florida, Georgia, Indiana, Iowa, Kentucky, Luisiana, Misuri, Montana, Nebraska, Nuevo Hampshire, Oklahoma, Ohio, Tenesí, Texas, Utah, Virginia y Virgina Occidental.