El canciller Marcelo Ebrard consideró un "gesto de ternura" por parte de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el considerarlo dentro de su posible gabinete federal, pero aprovechó para recordarle que aún no está nada decidido y le pidió ser humilde:
“Esperemos que la gente decida y veamos qué sucede, pero le agradezco el gesto de ternura, amistad.”
En entrevista para Café MILENIO, Sheinbaum sostuvo ayer ya verse como presidenta de México y planteó invitar a sus contrincantes por la candidatura de Morena a su eventual gabinete: el secretario de Gobernación, Adán Augusto López: y el canciller Marcelo Ebrard, quien subió el tono de la conversación.
“Yo le agradezco, qué tierna ¿no?, pero bueno, yo lo que diría es: a mí me encantaría que estuviera también, por ejemplo, en un cargo del gabinete que voy a encabezar. Yo creo que nos hace falta un poquito de humildad, la gente todavía no vota”, dijo ante medios tras participar en la firma de su reciente libro El Camino de México.
"Depende de ellos también, qué les gustaría, qué les interesaría, y por supuesto que tiene que haber diálogo y tiene que haber unidad y en ese sentido tiene que haber un espacio para todos y para todas”, dijo Claudia Sheinbaum tras confirmar que contemplaría a ambos aspirantes en su gabinete.
Ebrard ha tomado mayor cautela en lo que se refiere a sus aspiraciones políticas, por el momento ha decidido escribir y publicar un libro de su trayectoria política, y durante la presentación del mismo el 20 de marzo en el Palacio de Minería, expuso: “lo que tenemos para la contienda que se avecina, cada cual es lo que somos y lo que hemos hecho, lo demás no importa. Nuestros hechos, nuestra vida, nuestra persona. Eso es lo que proponemos.”