Una rebelión en Morena y algunos de sus aliados en el Congreso aplazó la discusión de la reforma que restringe facultades al Tribunal Electoral (TEPJF) frente a partidos políticos y legisladores.
De acuerdo con diputados, un grupo de 90 legisladores, 60 de ellos morenistas, rechaza la iniciativa por considerarla "retrógrada", pues limitaría derechos de minorías.
Aunque el coordinador de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier, aseguró ayer que la reforma al Tribunal sería aprobada, la rebelión de morenistas y aliados aplazó la discusión en la Comisión de Puntos Constitucionales.
Diputados de Morena, encabezados por Hamlet García y Emmanuel Reyes Carmona, llamaron a sus pares a cumplir con su obligación moral de votar en contra.
Salma Luévano, diputada de la comunidad transgénero y presidenta de la Comisión de Diversidad, planteó: "no vamos a permitir esta reforma regresiva, no vamos a permitir nos quiten lo poco que nos han dado, nos urgen más espacios".
La reforma constitucional propone frenar juicios de derechos políticos promovidos por mujeres, discapacitados, migrantes, indígenas y transgénero. Además, protege a los líderes partidistas contra juicios internos en el nombramiento de dirigencias, y ata de manos al Tribunal Electoral, en caso de impugnaciones de militantes.
AMLO criticó al TEPJF y dijo que no ve con "buenos ojos" a ese órgano porque ha hecho "cosas indebidas".
Aunque admitió no estar muy enterado de la iniciativa que se analiza en la Cámara de Diputados, consideró que el Tribunal no es un organismo confiable.
"No veo con buenos ojos al Tribunal porque ha hecho cosas indebidas. No es un tribunal confiable".
AMLO