Ni con fuerzas federales se ha mitigado la criminalidad
Por el contrario, se registran incrementos de más de 20 por ciento en cuanto a homicidios dolosos, pero hay otros delitos, también vinculados a la delincuencia organizada, con niveles disparados en los meses recientes, pese al despliegue de miles de efectivos de la Policía Federal y de las fuerzas armadas.
Integrantes del gabinete de seguridad nacional adjudican esta situación a la persistente fragilidad y corrupción de las corporaciones locales de policía y de procuración de justicia.
El pasado julio fue el mes con la cifra de homicidios dolosos más alta del sexenio: mil 842 casos de asesinatos intencionales.
En medio de un repunte de la violencia en 16 de las 32 entidades del país, Colima alcanzó una tasa histórica de asesinatos, desde el inicio de la estadística de incidencia delictiva, en 1997.
Igualmente se recrudece la crisis en la mitad de las entidades del país con altos índices de homicidios, la mayoría cometidos con arma de fuego. Las mayores subidas de julio, respecto al mes inmediato anterior ocurrieron, además de Colima y Guerrero, en Michoacán, al pasar de 107 a 187 asesinatos intencionales, así como Veracruz, de 100 subió a 168, y Tamaulipas, de 75 a 106 (La Jornada, 21/8/16).
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Gobernación, en Acapulco, Guerrero, los asesinatos subieron 10.5 por ciento de enero a julio de este año, respecto al mismo periodo de 2015, al pasar de 496 a 554.
La mayoría son cometidos con arma de fuego, aunque en el rubro otros
(aquí pudieran incluirse los golpes o explosivos) se ubica casi la cuarta parte del total de homicidios dolosos en este año.
El problema en ese puerto es el alto número de eventos, lo cual eleva la tasa, es decir, la ocurrencia de los casos respecto del tamaño de su población.
El nivel de 554 asesinatos intencionales (enero-julio 2016) se acerca a las cifras más críticas del sexenio pasado, cuando se llegó a 612 en los primeros siete meses de 2012.
En Chilpancingo, donde también se ha reforzado el operativo federal, a cargo del Ejército, se cometieron 125 homicidios dolosos de enero a julio pasado.
En Guerrero se concentra la segunda tasa más alta de ese delito (35.3 casos por cada 100 mil habitantes), sólo después de Colima (45.9). En esta entidad van mil 267 homicidios dolosos, con alzas constantes: inició con 166, en enero, y para julio reportó 215. Acapulco contribuye con casi 40 por ciento de los crímenes del estado.
En Tijuana, Baja California, en el periodo enero-julio pasado, el nivel acumulado de homicidios dolosos fue de 449; en el mismo lapso de 2015, se interpusieron 109 denuncias más, es decir, un incremento de 25 por ciento. Igual que en el resto de las entidades, la mayoría de los crímenes son ejecutados con armas de fuego.
En Culiacán, Sinaloa, el nivel de este delito permanece casi igual, al pasar de 227 a 220, en los meses comparados. La lista de delitos de alto impacto, elaborada por el gobierno federal, es encabezada por Acapulco, Tijuana, Culiacán, Ecatepec, Guadalajara, Monterrey, Zapopan, Iztapalapa, Ciudad Juárez, Chilpancingo y Nezahualcóyotl.
Más violaciones sexuales
El ambiente de brutalidad en el país tiene otras alertas. Por ejemplo, en Ecatepec, estado de México, las violaciones sexuales se incrementaron, en el lapso referido, casi 300 por ciento, al pasar de 49 a 183 ataques. Ese delito cobró fuerza en Tamaulipas; este año se han denunciado 323 violaciones sexuales; le siguen Nuevo León (343), Guanajuato (304), Ciudad de México (340), Baja California (368), Chihuahua (570) y estado de México (mil 219).
Igualmente, en Ecatepec continúa al alza el robo de vehículos, en delitos ejecutados con y sin el uso de violencia. Entre enero y julio pasado ya se habían denunciado 5 mil 19 hurtos, esto es, una quinta parte de todos los cometidos en el estado de México, entidad en que se genera casi la mitad de todos los casos de robo de vehículos en el país.