No, España no castigó a la izquierda, España castigó a un mal gobierno.
Florestán
En su ofensiva permanente contra la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el presidente López Obrador hizo ayer la declaración más grave en lo que va de su gobierno, al acusarla de querer darle un golpe de Estado técnico.
Todo estalló cuando le preguntaron sobre una suspensión judicial para frenar la tala en tramos del Tren Maya, que fue cuando disparó: no pueden cancelar obras en beneficio del pueblo porque de acuerdo a la Constitución tenemos nosotros el derecho a hacer obras en beneficio del pueblo. Una cosa es que violen la Constitución cobrando los ministros más de lo que cobra el presidente, y otra querer dar un golpe de Estado neutralizando al Poder Ejecutivo, o sea, que ya no ejecutemos nada. Eso es cancelar un poder, eso sería un golpe de Estado técnico, acusó.
Esta es, insisto, la más grave acusación de un titular del Poder Ejecutivo al Poder Judicial y la del mismo presidente López Obrador contra la Corte, además de subir el tema, golpe de Estado, al discurso oficial, con todas las implicaciones que esto pueda conllevar además de comprometer en el tema a las fuerzas armadas, al meterlas en esta conversación, cuando la historia ha demostrado su lealtad a las instituciones, empezando por la Constitución y su rechazo a cualquier violación a ésta, venga la orden de donde venga.
¿Qué está viendo López Obrador para usar el recurso del golpe de Estado y, además, originado en la Suprema Corte? ¿Qué está imaginando? ¿Por qué pone ese tema en la conversación nacional a 16 meses de terminar su gobierno y a un año de las elecciones presidenciales de junio de 2024?
Debe ser algo, y grave, que desconocemos, porque de lo contrario no llegaría a este extremo de denunciar el riesgo de un golpe de Estado en México y acusar a la Corte de instigarlo.
No sé qué estará calculando para la última parte de su gobierno, pero lo que advierte está más allá de la serenidad.
RETALES
1. ENCUENTRO. Hoy es el primer encuentro de la comisión bilateral del Congreso con el gabinete de seguridad. Asisten los secretarios Adán Augusto López Hernández, Rosa Icela Rodríguez, el general Luis Cresencio Sandoval, el almirante Rafael Ojeda y Audomaro Martínez, del CNI. Ya conoceremos las filtraciones;
2. CAOS. En la oposición es el caos por las ambiciones personales y de grupo de los dirigentes del PAN y del PRI, que no tienen el procedimiento para elegir a su candidato presidencial. Y cuando quieran, ya no van a poder. No aprenden; y
3. REVIRE. El pasado día 2, la asesora de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Liz Sherwood, se reunió con el presidente López Obrador en su palacio. Del encuentro solo se habló de lo bien que había ido todo. Pero Liz, allá, declaró que México es la principal puerta de entrada de fentanilo al suyo, lo que el Presidente ha negado.
Nos vemos mañana, pero en privado