Repruebo terminantemente que se use la fuerza pública como medio de dirimir los conflictos sociales que aquejan al estado”, advirtió.
Por ello, solicitaré la intervención de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión para que investigue el desalojo de quienes ejercían su derecho a manifestarse de forma pacífica. Exijo que la Comisión Estatal de los Derechos Humanos haga lo propio”, enfatizó el legislador.
Consideró que el nivel de confrontación entre el rector de la Universidad Autónoma del Estado y el gobernador, Graco Ramírez, está afectando el sano funcionamiento de las instituciones y pone en riesgo la estabilidad política y social de Morelos.
Agregó que no es posible que la gobernabilidad del estado esté sujeta al protagonismo de los actores políticos.
Lamentó la falta de oficio político del gobernador para mantener la paz social en el estado y dijo que si no hay capacidad para gobernar, lo preferible sería pensar seriamente en dejar el cargo.
Ni la Universidad ni el estado de Morelos merecen estar sujetos a los enfrentamientos personales entre el rector y el gobernador, por lo que lo preferible es que, en un acto de responsabilidad política, ambos sujeten su permanencia en el cargo a lo que la comunidad universitaria y los morelenses, respectivamente, decidan, a través de un plebiscito.
El momento político que vive el estado requiere soluciones drásticas para que los morelenses recuperemos la tranquilidad y paz sociales”, concluyó Matías Nazario.