:Que en círculos del área de seguridad no pasan por alto que el recién removido comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo, se colgó algunas medallas durante su encargo de tres años y ocho meses.
Su equipo fue responsable de las capturas de Joaquín “El Chapo” Guzmán, Servando Gómez “La Tuta”, el matrimonio Abarca y “El Cabo” Gil (caso Ayotzinapa), así como de Vicente Carrillo Fuentes, hermano de “El Señor de los Cielos”.
Deja también una hoja con la aprehensión de mil 764 secuestradores, 254 bandas desarticuladas y 2 mil 600 víctimas de plagio liberadas durante este sexenio.
:Que los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y de Educación, Aurelio Nuño, llamaron ayer a los senadores priistas a ponerse en pie de guerra y salir al paso de las críticas a la gestión gubernamental.
En privado, el primero les pidió ir a los estados y convencer del trabajo de esa administración, al señalarles que recibieron un país bañado en sangre y que hoy esa violencia comienza a quedar atrás.
Nuño planteó la necesidad de explicar la reforma educativa, pero dicen entre los senadores del PRI que ya es tarde para ello, porque ahorita en las entidades lo que tiene más molesta a la gente son los gasolinazos y el aumento en la luz.
:Que durante la inauguración del Hospital Regional Militar en Sinaloa, donde el presidente Enrique Peña Nieto manifestó su pesar por la muerte de Juan Gabriel, estuvo presente otro personaje que en su momento puso al cantante en el centro de la vida política.
Se trata del ex gobernador de esa entidad Francisco Labastida, a quien el cantante dedicó durante la campaña presidencial del 2000 un estribillo que decía: “Ni Temo, ni Chente, Francisco será presidente”. El priista ocupó uno de los lugares especiales en el acto y aplaudió fuertemente cuando se recordó a “El divo de Juárez”.
:Que poco a poco el sector social comienza dar resultados. Ayer en Oaxaca, el secretario de Desarrollo Social y el director general del IMSS, José Antonio Meade y Mikel Arriola, superaron la meta de afiliar a 6.6 millones de estudiantes de universidades y preparatorias públicas del país.
No es cifra menor el que esta población cuente ya con servicios médicos gratuitos y que la meta se haya cumplido mucho antes de lo previsto.