Los tiempos de dolor siempre son precedidos de los tiempos de confusión.
Florestán
Le he contado que nunca había visto una sucesión presidencial tan adelantada como la que decidió Andrés Manuel López Obrador, en julio de 2021, tras el descalabro electoral de las intermedias de ese año cuando no solo perdió su bastión, Ciudad de México, sino la mayoría calificada en la Cámara de Diputados que impidió sus reformas constitucionales emblemáticas: eléctrica, electoral y la militarización de la Guardia Nacional.
Y por eso desde entonces autorizó a los que despectivamente bautizó como sus corcholatas, y él arrogantemente se autodesignó su destapador, para iniciar las precampañas, por lo que Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, luego Adán Augusto López Hernández, que trajo de Tabasco a Gobernación, y al final Ricardo Monreal, iniciaron sus precampañas dejando en claro que él, además de Presidente de la República, comandante de la fuerzas armadas, cabeza de la cuarta transformación y líder de su partido y movimiento, era el jefe de campaña y por quien votarán el próximo 2 de junio.
Por eso hace dos semanas anunció que el 6 de septiembre entregará a su candidato presidencial la dirigencia de la cuarta transformación y el sábado se asumió, en el Zócalo, como jefe de campaña al declarar que nada ni nadie podrá vencernos en las elecciones del año que viene, a lo que hay que agregar su reiterada condena de que la oposición está moralmente derrotada.
Que no quede duda, pues, de que da por descontado su triunfo sino también el desconocer cualquier eventual victoria de la oposición, lo que nos llevaría a un conflicto constitucional y social no visto desde hace un siglo, porque nunca reconocerá una derrota electoral, como nunca la ha reconocido en su vida política.
La diferencia, grave, es que antes era opositor y ahora es el Presidente de la República y es él o el caos, como decían de Luis Echeverría hace medio siglo.
RETALES
1. XÓCHITL. López Obrador es el primer presidente que definirá a su candidato y al de la oposición. Sigue impulsando a Xóchitl Gálvez que antes de él no estaba en estas ligas. Cada que la embiste, la fortalece. Lo que no sé es si a ella le alcance para llegar a las elecciones del 2 de junio, dentro de 10 meses y 23 días;
2. MEXICANA. Tras el fallo de un tribunal de circuito, ayer, todo quedó listo para que mañana el presidente López Obrador anuncie la creación de la Compañía Mexicana de Aviación, manejada por la Secretaría de la Defensa Nacional. El costo de la marca y de algunos bienes es de 814 millones de pesos; y
3. AMIGUIS. La ofensiva contra Adán Augusto López Hernández se centra en que López Obrador tomó distancia de él. La estrategia viene de las otras corcholatas y de la oposición, como si estas precampañas fueran definitorias en la decisión presidencial del 6 de septiembre.
Nos vemos el martes, pero en privado