El 31 de julio pasado, el entonces aspirante aseguró que recibió mensajes de muerte por parte de José Adolfo Macías, El Fito, quien se encuentra actualmente encarcelado y es líder de Los Choneros, quienes están ligados al narco mexicano.
“Recibí mensajes del cártel de Sinaloa, me refiero a alias El Fito en mi contra y en contra del equipo de campaña con una advertencia que si sigo refiriéndome a él y a su estructura, ellos atacarán en mi contra o atentarán contra mi vida”, declaró ante medios de comunicación.
“Esto lo que hace es confirmar que nuestra propuesta de campaña afecta gravemente a estas estructuras criminales y aquí estoy yo dando la cara, no les tengo miedo”, aseguró.
“Indignado y consternado por el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio. Mi solidaridad y mis condolencias con su esposa y sus hijas”, expresó el mandatario saliente, Guillermo Lasso, a través de la red social X.
Agregó que “por su memoria y por su lucha, les aseguro que este crimen no va a quedar impune” y que “el crimen organizado ha llegado muy lejos, pero les va a caer todo el peso de la ley”.
La fiscalía precisó en la red social X que uno de los sospechosos del atentado, que resultó herido durante el cruce de balas con el personal de seguridad, fue aprehendido y trasladado malherido hasta la Unidad de Flagrancia en Quito, pero murió en una ambulancia de los bomberos al ser llevado a un hospital. Versión confirmada por Daniel Borja, periodista de TC Televisión en Ecuador, en entrevista para MILENIO con Alejandro Domínguez.
Ayer circulaba en redes sociales una foto del cuerpo tirado del supuesto atacante acompañada de un texto que afirmaba que fue ejecutado en los pasillos de la fiscalía en Quito.
Además, Borja afirmó en la entrevista que “también una de sus candidatas a la Asamblea Nacional, Gissella Molina, recibió un impacto de bala (…), la misma que se encuentra estable, en estos momentos”.
Villavicencio era uno de los ocho candidatos registrados para la elección presidencial del 20 de agosto en primera vuelta.
El político, de 59 años, de acuerdo con la mayoría de las encuestas citadas por Reuters y AP y medios locales, no figuraba entre los favoritos, tenía un escaso 10 por ciento de las preferencias, aunque era una figura reconocida por haber denunciado en el pasado diversos casos de presunta corrupción gubernamental.
Sin embargo, la agencia AFP señala que Villavicencio aparecía segundo en la intención de voto con 13.2 por ciento, detrás de Luisa González (26.6 por ciento), afín al ex mandatario socialista Rafael Correa (2007-2017), según el más reciente sondeo de Cedatos.
Critíco de Corea
Villavicencio fue un crítico abierto de Correa y una de sus investigaciones periodísticas fue parte de las denuncias que llevaron al banquillo al ex presidente por recibir sobornos de empresarios.
Por ese caso, Correa, quien está refugiado en Bélgica, fue condenado en ausencia a ocho años de cárcel.
De acuerdo con Ecuavisa, Villavicencio recibió amenazas “en el pasado, cuando realizaba investigaciones” contra Correa y en 2014 “señaló que desde una camioneta se realizaron disparos contra su hogar”.
Ese año, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos pidió medidas cautelares tras ser sentenciado a 18 meses de cárcel por injuriar a Correa. Por ello se ocultó en la selva para evitar cumplir la condena.
Dos años después, un juez ordenó su encarcelamiento por revelar información reservada con correos hackeados a la administración de Correa para sustentar investigaciones sobre corrupción en negocios petroleros.
Entonces, se refugió en Lima hasta 2017.
“Han asesinado a Fernando Villavicencio. Ecuador se ha convertido en un Estado fallido. Dueles Patria” escribió anoche Correa en X (antes Twitter)
AAG