Con el oficialismo de izquierda irán ya apuntadísimos, Morena, el PT y el PVEM. se sumará Nueva Alianza aunque falta por definir los últimos acuerdos y probablemente Encuentro Solidario. Por separado, los cinco partidos en el 2021 sumaron el 38 por ciento de la votación total. Se asume que algunos de los votos que fueron para otros partidos, como Encuentro Social, Renovación Política Morelense y Futuro, podrían irse a esta coalición según el candidato, con lo que esa base de votantes podría alcanzar el 40%, que superarían apenas el cuarto de millón de sufragios; una cifra competitiva pero que no define necesariamente una elección.
El Frente Amplio por Morelos representa la coalición opositora con mayor solidez entre los probables votantes. Sus integrantes PAN, PRI, PRD, RSP y Morelos Progresa (hasta ahora), lograron por separado en la elección del 2021 el 31% de la votación total, alrededor de la tercera parte de la votación efectiva. Como en el caso de la coalición de izquierdas, los votos que en el 2021 fueron para otras fuerzas ya sin registro como Apoyo Social, Bienestar Ciudadano, Fuerza Morelos, Humanista, Fuerza por México, y Socialdemócrata, podrían ir con el Frente Amplio a través de los liderazgos políticos y organizaciones sociales que fueron base de esos partidos; de ser así, el FAMor podría sumar hasta un diez por ciento adicional de votos, que lo ubicaría con un piso del 41%, ya en rango de competencia con el oficialismo.
Quedaría aún por definirse el destino del MAS, cuyo registro se perdería en las próximas semanas. El partido obtuvo el 3% de los votos en el 2021 y su posición crítica hacia las políticas de los gobiernos federal y estatal parecen acercarlo más al Frente Amplio que al oficialismo.
En la otra cancha, Movimiento Ciudadano insiste en ir solo. En el 2021, los naranja obtuvieron el 8% de los votos en disputa. Lo que los convirtió, por poco, en la tercera fuerza política del estado. El debate sobre si aliarse con el Frente Amplio o caminar en solitario a las elecciones del 2024, podría erosionar su base de votación, especialmente por tres factores, primero, una de las responsables de fortalecer la estructura de MC en todo el estado, Marisol Becerra de Municipios en Movimiento, ya está abiertamente en el Frente Amplio; segundo, la conversión de la del 2024 en una elección plebiscitaria desde la propaganda oficial y la de la oposición más fuerte, merma sus posibilidades frente a los votantes; tercero, la aparición de una figura como Alfonso Duarte, parece más un golpe a la unidad de los emecistas que una suma de cuadros al interior del partido. En contraste, figuras con alto respaldo ciudadano como Jessica Ortega y Luz Dary Quevedo podrían funcionar en el control de daños para que la caída no resultara tan relevante.
Faltan por definir muchas cosas, entre ellas los nombres de los candidatos a la gubernatura que bien podrían recomponer la balanza, la probable ruptura entre los cuadros morenistas una vez que se defina su nominación, el futuro del MAS, la influencia que pudieran tener eventuales candidaturas independientes, los efectos de la crisis política en los posibles acuerdos preelectorales y en la percepción de los votantes, el éxito de las precampañas y campañas. Pero en esencia podría decirse que, pese a lo que reportan las encuestas que actualmente reflejan una preponderancia de Morena en la opinión pública local, lo cierto es que en Morelos hay tiro, lo que obligará a los partidos a ser mucho más cuidadosos con la asignación de candidaturas, no con cualquiera ganarán.
@martinellito