Que la mayoría parlamentaria de Morena encabezada por Ignacio Mier en la Cámara de Diputados alista un albazo con su iniciativa para extinguir 13 de los 14 fideicomisos del Poder Judicial, por un monto superior a 20 mil millones de pesos, a fin de discutirla y votarla la próxima semana; no obstante, los trabajadores sindicalizados de la Corte y la Judicatura se declararon en estado de alerta ante la amenaza de un recorte que afectará no solo la operación de juzgados, sino prestaciones establecidas en su contrato colectivo.
Que además de lanzar alfilerazos al GIEI y a los asesores de los padres de los 43, AMLO expuso su hipótesis de que “la desaparición de los jóvenes fue responsabilidad de las bandas criminales en contubernio con autoridades locales”, por lo que descartó que fuera ordenada desde arriba por Enrique Peña o su entonces secretario de Defensa, Salvador Cienfuegos. Es decir, palabras más, palabras menos, la base de la denostada verdad histórica.
Que la Primera Sala de la Suprema Corte analizará hoy la propuesta del ministro Arturo Zaldívar que, según fuentes judiciales, propone desechar la controversia constitucional que fue promovida por el gobierno de Chihuahua contra la distribución de libros de texto gratuitos en la entidad. En caso de prosperar, se ordenará el levantamiento de la suspensión que hasta hoy ha impedido que la Secretaría de Educación Pública pueda repartir el material educativo a los alumnos.
Que en un proceso de sucesión para la Rectoría de la UNAM que avanza con orden y respeto, la nota discordante ha resultado ser el director de la Facultad de Derecho, Raúl Contreras Bustamante, quien parece resentir todavía los estragos del episodio de semanas atrás que lo llevaron a cortar la cabeza de su secretario general por el repudio de la comunidad puma, pero en especial de colectivos feministas. La grilla contra otros competidores se debe acaso, dicen los que saben en CU, al temor de quedar fuera del listado final que la Junta de Gobierno dará a conocer el 12 de octubre. A ver.