Nadie la vio venir. El gobierno de Israel estaba convencido de que la organización paramilitar Hamás había perdido capacidad para causar daño. Y, sin embargo, el sábado un ataque masivo de gran escala logró penetrar el inmenso muro que, en Gaza, separa a las poblaciones israelíes y palestinas.

En solo 72 horas se calcula un saldo de más de mil víctimas. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, con su retórica siempre arrogante, aseguró que este ataque sería vengado de manera inolvidable para el pueblo palestino.

Sin embargo, conforme la sorpresa se va disipando, es claro que esta guerra no se está librando solo entre Palestina e Israel. Detrás de Hamás y su movimiento de resistencia hay otra nación mucho más poderosa: Irán.

Voceros de alto nivel del gobierno iraní fueron rápidos para declarar su apoyo a las “laudables” operaciones de Hamás. Irán tiene años otorgando apoyo financiero y también militar a esta organización, lo cual hace presumir que los misiles lanzados sobre territorio israelí provengan de ese país.

Se suma a este operativo el que desplegó de manera coordinada, desde otro punto geográfico, el grupo paramilitar Hezbolá. Ayer domingo varias docenas de cohetes fueron arrojados desde Líbano sobre la frontera norte de Israel. En efecto, ese país se encuentra hoy asediado desde dos frentes.

El punto de convergencia entre Hezbolá y Hamás es nuevamente el gobierno iraní, lo que lleva a suponer que el conflicto de este fin de semana trasciende la crisis palestino-israelí, porque en realidad se trataría del prólogo de una guerra entre Irán e Israel.

Expertos en la política de la región coinciden con que el móvil iraní para entrar en esta conflagración sería evitar la firma de un acuerdo destinado a normalizar las relaciones entre Arabia Saudita e Israel. Hasta ahora, la fractura entre estos dos gigantes militares de la región había beneficiado a Irán. Sin embargo, el acuerdo citado significaría un escenario adverso que el gobierno iraní quiere evitar a toda costa, por lo pronto utilizando a Hamás y Hezbolá como sus principales alfiles.

Zoom: Estados Unidos ha hecho explícito su apoyo a Israel en esta guerra, ¿será que Rusia vaya a hacer lo propio con Irán? La escala de este conflicto es aún incierta, pero podría ser de una proporción alarmante.