Han pasado 30 días desde que los milicianos de Hamás realizaran una operación sin precedentes en territorio israelí. En una incursión por tierra, que apenas encontró resistencia, mataron a cientos de civiles en el ataque más mortífero sufrido en un solo día por Israel. Desde la tarde de ese mismo día, Israel lanzó una serie de ataques contra la franja de Gaza y su población que tampoco tiene precedentes.
A continuación, repasamos las cifras de bombardeos, fallecidos, tanto adultos como niños, y de edificios perdidos tras un mes de conflicto. Son números difícilmente comparables con los de otros choques recientes.
Ataques aéreos
En los 30 primeros días de la guerra entre Israel y Hamás, las fuerzas israelíes aseguran haber lanzado 11.000 ataques aéreos sobre la franja de Gaza, un territorio de tan solo 365 kilómetros cuadrados. Los primeros 6.000 se concentraron en una semana (entre el 7 y el 13 de octubre). Aunque las fuerzas israelíes no dejan claro si en cada ataque se incluyen varios misiles, cohetes y bombardeos, es lo más probable.
¿Son muchos 11.000 ataques aéreos? Para comparar, esa cifra supone nueve veces más que los que Rusia realizó en Ucrania durante el primer mes de la invasión. Y 18 veces más que los que Estados Unidos lanzó de media cada mes en Afganistán en 2019, uno de los años con mayor número de ofensivas estadounidenses.
Por otro lado, Hamás dijo haber lanzado 7.000 ataques aéreos sobre Israel el 7 de octubre, 3.000 según las autoridades israelíes. La inmensa mayoría fueron repelidos por el escudo antimisiles de Israel.
Las dimensiones de la ofensiva israelí en Gaza son las más intensas que se han visto en Oriente Próximo desde Siria en 2019. El Proyecto de Datos de Eventos y Ubicación de Conflictos Armados (ACLED, por sus siglas en inglés), ha documentado al menos 761 operaciones de bombardeos sobre Gaza y Cisjordania desde el 7 de octubre. Esta cifra, parcial ya que solo incluye bombardeos acreditados tras un largo proceso de verificación, es de las más altas registradas en un solo mes en la zona desde que hay datos. Son cifras que solo se acercan a las de los bombardeos de Estados Unidos en Siria en 2017 (1.257 ofensivas aéreas solo en el mes de abril) o en mayo de 2019 (1.119 bombardeos).
Fallecidos
La invasión rusa de Ucrania, que sacudió la opinión pública occidental y creó un frente unido de países contra el Kremlin, se sigue cobrando vidas civiles más de un año y medio después: hasta mediados de octubre se han registrado 9.806 fallecidos.
En Gaza, según las cifras del Ministerio de Sanidad que utilizan también Naciones Unidas, los muertos son ya más de 10.000. La rapidez a la que se han ido acumulando no tiene comparación posible con el conflicto en el este de Europa. Cabe recordar que desde Ucrania se puede salir: solo en la primera semana cerca de un millón de personas dejó el país. En Gaza, sus habitantes no pueden abandonar la Franja.
En Israel se cuentan hasta el momento 1.400 víctimas civiles, un récord desde que hay datos oficiales del conflicto en la zona recogidos por Naciones Unidas. Fueron todas en la primera semana de guerra: las autoridades locales no han actualizado esa cifra desde el pasado 15 de octubre.
A pesar de que países como Estados Unidos pusieran en duda la fiabilidad de las cifras de fallecidos en la Franja, todos los organismos internacionales los reconocen y utilizan. “Los números del Ministerio de Salud de Gaza son generalmente fiables”, explicaba a EL PAÍS Omar Shakir, director de Human Rights Watch (HRW) para Israel y Palestina, organización que ha trabajado más de 30 años sobre el terreno. “Hemos hecho nuestra propia verificación en ataques concretos y hemos encontrado que el número coincide generalmente con el que da el ministerio”, detallaba Shakir. De hecho, son datos que utilizan también Naciones Unidas y el Departamento de Estado de EE UU en su informe anual.
Los niños
El número tan elevado de fallecidos en Gaza se explica, en parte, por el territorio que está siendo atacado: en la Franja viven 2,2 millones de personas en un área de 365 kilómetros cuadrados. Eso implica que en un kilómetro cuadrado de la Franja viven nueve veces más personas que en un territorio del mismo tamaño en España, y 11 veces más que en Ucrania.
Tampoco tiene precedentes el número de niños que han sido víctimas de los bombardeos israelíes. En Gaza, casi uno de cada dos habitantes tiene menos de 18 años.
Es tristemente lógico que, ante un bombardeo indiscriminado en un territorio tan pequeño, casi uno de cada dos fallecidos sea un menor. En Ucrania han sido 531 hasta octubre, el 7% de los fallecidos.
Edificios destruidos
Según datos de Naciones Unidas, en la Franja hay más de 40.000 edificios que han sido destruidos o están inhabitables, además de unos 220.000 que registran daños. En resumen, cerca del 45% de los edificios residenciales de Gaza están afectados por las bombas.
En los primeros cuatro meses de invasión de Ucrania (cuya extensión geográfica multiplica por más de 1.000 veces el área de Gaza), el Banco Mundial calculó que se habían dañado unos 817.000 edificios con uso residencial, cerca de un 4% de todos los del país. En una de las zonas más golpeadas, la región oriental de Donetsk, casi el 30% de las casas estaban severamente dañadas.
Uno de los símbolos bélicos de la dureza de ese conflicto fue el largo asedio de la ciudad de Mariupol: durante casi tres meses el ejército ruso cercó la ciudad hasta hacerse con ella. Un análisis de Naciones Unidas a partir de fotos satelitales calculó que se había dañado el 32% de todos los edificios de esta urbe a orillas del mar de Azov. Para Ciudad de Gaza todavía no hay estimaciones oficiales, pero las imágenes satelitales ya permiten ver el alcance de la destrucción en barrios y zonas residenciales, además de campos de refugiados.