Que serán 89 los senadores que van por la reelección en 2024 con 45 de Morena, 13 del PAN, 10 del PRI, siete de MC, cinco del PT, cuatro del Verde, tres del PRD, uno del PES y uno del Grupo Plural, entre los que figuran Olga Sánchez Cordero, Susana Harp, Mónica Fernández, Rafael Espino, Alejandro Rojas Díaz-Durán, Sergio Pérez, Manuel Añorve, Sylvana Beltrones, Claudia Anaya, Kenia López Rabadán, Julen Rementería, Lilly Téllez, Juan Manuel Fócil, Jaime Bonilla, Manuel Velasco, Clemente Castañeda y Laura Ballesteros.
Que hablando del Senado, en los pasillos se dice que Nancy de la Sierra, quien ya estuvo en la bancada del PT y en el Grupo Plural, estará buscando dejar el PRI, al que se sumó apenas en octubre pasado, y en los próximos días tendrá un acercamiento con el coordinador de MC, ya que Alejandro Moreno, dirigente del tricolor, no le cumplió lo prometido, es decir, la candidatura a la gubernatura de Puebla. Se acumulan las quejas contra el campechano.
Que tres meses después de la presentación del quinto Informe de gobierno, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, comparecerá el próximo martes ante comisiones de la Cámara de Diputados para la glosa del documento, pero todavía peor es el caso de la ex secretaria de Energía, Rocío Nahle, quien de plano plantó a los legisladores y dejó tirado el cargo para convertirse en precandidata morenista al gobierno de Veracruz mucho antes de llegar a la cita en el Palacio de San Lázaro, que ella misma pidió programar… para el 12 de diciembre. Hay prioridades, faltaba más.
Que el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí, designó a Tomás Humberto Rubio, hasta ayer director de la Facultad de Contaduría, como secretario Administrativo en sustitución de Luis Agustín Álvarez Icaza Longoria durante una ceremonia en la Torre de Rectoría, horas después de las agresiones de grupos externos en CU, por lo que aprovechó para sostener que la institución “no se detendrá ante provocaciones ni actos injerencistas que pretendan desestabilizarla”.